Fórmulas para detectar a un mentiroso compulsivo
La mentira, dijo Oscar Wilde, un deslumbrante poeta mentiroso, es lo que mueve a los honestos. El mundo es el espacio perfecto para el truculento, apuntó en otra ocasión. Y si a eso agregamos que el ser humano, al menos el que vive inserto en grandes urbes pobladas, al día dice entre 20 y 200 mentiras, según lo explican expertos, el mundo está abarrotado de falsedad.
Por eso se hace necesario tener las herramientas para poder detectar la mentira. Y estas herramientas son las que ha transmitido, en una reciente charla TED Ed, el psicolingüista Noah Zandan. A su juicio, hay cuatro modos característicos que aplican los mentirosos compulsivos al mentir. Y Noah Zandan comparte esos trucos para que podamos descubrir a los que mienten o, al contrario, podamos mentir con más eficiencia.
Cuando las personas mienten pocas veces se refieren a ellas mismas. El mentiroso se distancia de la mentira. Usa muchos pronombres personales para despistar. Cuentan un cuento protagonizado por otros. Y les resulta.
El experto dice que, en este punto, hay un rasgo de sentimiento de culpa a nivel inconsciente. Se utiliza el lenguaje negativo para salvar el propio pellejo. Un ejemplo: "Traté de llamarte para avisar que llegaba tarde, pero mi estúpido teléfono no funcionó".
Al mentir nadie es rebuscado. La mentira implica rapidez y eso, a veces, impide elaborar mucho el truco.
Hablar mucho delata al mentiroso. Los nervios obligan a los mentirosos a repetir frases y alargar palabras. El más honesto siempre es sintético. El fantasioso siempre es vago. La verdad es precisa, la fantasía es nebulosa.
Aplique, en fin, estas maniobras que recomienda Noah Zandan y vivirá únicamente en la verdad.J