Las Brasas Porteñas
El comensal chileno tiene una inclinación profunda por el fuego y por los productos directamente confinados en él. Somos animales de costumbre y una de nuestras principal hábito es "parrillar", término que se ha acuñado en nuestra idiosincrasia y se ha transformado en un desde para cualquier junta de amigos, familia o partido de fútbol. Lo cierto es que las parrillas tienen más de un beneficio en lo gastronómico, entre ellos, que es una de las formas de cocción que menos afecta el producto o de las más naturales (mientras sólo se use fuego y no exceso de aliño), por ende donde se siente mejor el sabor natural de los productos. Eso sí al ser menos invasiva, es también la que más muestra de la experiencia y experticia del cocinero, quien debe manejar, a sabiendas o no, a la perfección tiempos, puntos de cocción versus resultado y aceptación popular. Otra de las virtudes es que puede ser utilizada por una gran variedad de alimentos y todos quedan bien. Además, es un método de cocción versátil y bien considerado en la cocina, no todos los locales se atreven a trabajar con él y quien maneje de buena forma este concepto tiene según nuestra opinión, parte del cielo ganado. En Valparaíso, Las Brasas Porteñas ubicada en, se alza como un muy buen exponente de este método de cocción y además lo muestran a público. La parrilla está al medio del salón, que nos da desde el inicio una buena impresión, así también su certificación expresada en la carta, donde pueden ostentar una certificación en manipulación de alimentos de forma limpia y trasparente, lo que es un aval de seguridad. En lo gastronómico, probamos un entrecot, de aproximadamente medio kilo o más que estaba correcto en todo punto a evaluar, crocante en la corteza, jugoso, en excelente punto, bien en sabor, no se escondía el sabor ni se dañaba la textura, es decir, un excelente producto. También la entraña de muy buena calidad, sabrosa, excelente cocción y muy buena porción, todo en son además de una parrillada tradicional, que incluía todo lo que uno siempre espera, lomo, pollo, papas, interiores, entre otros. Además, está disponible en la carta una amplia oferta de pastas, ensaladas y platos que quizás distraen la atención de la parrilla, pero le dan un buen acompañamiento y un excelente final. Algo más caro de lo normal pero vale la pena.