l Una chilena y una argentina fueron detenidas por narcotráfico. En el paso Los Libertadores personal del Servicio Nacional de Aduanas y la Brigada Antinarcóticos, efectuaron un control al equipaje y pasajeros de un minibús proveniente de Argentina. Allí se descubrió que la trasandina F.A.F., 21 años, traía adosado a su cuerpo una faja lumbar, la que escondía un paquete confeccionado con cinta adhesiva negra, que contenía más de un kilo de cocaína. Dijo que la chilena K.V.Q., 33, le pagó para ingresar el alucinógeno. Quedaron presas. J

l Manuel Fernández vive frente a la playa Las Torpederas, balneario donde es el encargado de la vigilancia y seguridad. Cuenta que sagradamente se despierta a las 06.00 de la mañana, y así lo hizo ayer cuando miró hacia la arena. Allí divisó el cuerpo de una persona boca arriba fuera de la pleamar. "Bajé a certificar que era un occiso y cuando lo hice llamé al 137 de la Armada. Llegaron como a los cinco minutos", comentó el trabajador que admitió hace tiempo no aparecía un cadáver en el lugar. La policía marítima avisó del hecho al fiscal de turno, que dispuso la concurrencia de la Brigada de Homicidios y el Laboratorio de Criminalística de la PDI. Los detectives establecieron que era un varón entre 55 y 60 años, que está como N.N al no portar una identificación. De aproximadamente 1.75 de altura, contextura gruesa, tez blanca, pelo entre cano; vestía camisa rosada, pantalón de gabardina gris, calcetines y zapatos del tipo mocasín de color negro.

Tras el examen preliminar al cuerpo no se encontraron lesiones atribuibles a terceras personas, sí erosiones menores compatibles con el arrastre. No tenia hálito alcohólico, y una de las hipótesis es que se haya quedado dormido en la playa, y al subir la marea haya sido arrastrado, y pereció por una asfixia por inmersión. Otra tesis es que sea un suicidio. Tras los peritajes, pasadas las 09.00 horas el cadáver fue llevado hasta la morgue del Servicio Médico Legal para el examen de autopsia, que determinará la causa del deceso. Mientras que un peritaje dactilar (huellas) buscará identificarlo. J

"Sebastián tranquilo, te amamos hijo", señalaron ayer entre lágrimas los familiares del ingeniero, tras conocer que estará 20 años privado de libertad por el crimen de su ex pareja, la sicóloga Karla Adam, ocurrido en julio de 2013 en el cerro Barón.

La semana pasada la tercera sala del Tribunal Oral en Lo Penal de Valparaíso, dictaminó la culpabilidad de Sebastián Sanhueza Tapia, 25 años, por el femicidio de la profesional, a la que ultimó de cuatro puñaladas. Restaba saber de la condena, la que se comunicó ayer pasadas las 13.00 horas.

La Fiscalía y la parte querellante solicitaban presidio perpetuo calificado (40 años de encierro), pero los jueces le reconocieron al ingeniero la atenuante de irreprochable conducta anterior, ya que no tenía antecedentes. De esta forma lo sentenciaron a presidio perpetuo simple, es decir, 20 años de presidio mayor en su grado máximo. En medio de llantos y abrazos con sus familiares salió de la sala Elena Muñoz, madre de la víctima. "Lo único que quería es que se hiciera justicia por mi niñita, porque nadie me la va a devolver, era una persona maravillosa. El asesino tenía que pagar y estoy feliz porque se limpió la memoria de Karla. Le doy las gracias a todos los que me apoyaron", expresó abrumada por la emoción, fundiéndose en un abrazo con su abogado y el fiscal, para luego reunirse afuera del juzgado con amigos de su hija que llegaron con bombos y carteles a exigir justicia. Edgardo González, abogado querellante, resaltó que la verdad de la familia salió a flote y se hizo justicia.

El fiscal jefe de Valparaíso, Cristián Andrade, valoró el trabajo desplegado por la fiscal Greta Fuchlocher, donde el tribunal acogió sus planteamientos, pese a que se desestimó el presidio perpetuo calificado. Se mostró conforme con la sentencia, pero igual anunció que analizarán la sentencia para evaluar si se interpone algún recurso ante la Corte, para así conseguir una pena mayor. J