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Duro revés en el aconcagua Everton cayó en San Felipe y se aleja del puntero

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Tras la farra que tuvo Everton en la primera mitad del campeonato (y en donde permitió que el actual líder del torneo, San Luis de Quillota, se aleje en punta), que quedó en claro que la única posibilidad de ascenso para el cuadro viñamarino pasa por cambiar la actitud y no regalar nada más. Y al menos por resultados, algo de aquello se había entendido primero ante Copiapó y luego frente a San Luis y La Serena, en donde se sumaron nueve puntos de nueve.

No obstante ayer en el Valle del Aconcagua, se volvió a observar a un Everton desganado y poco protagonista ante un rival que con técnico nuevo, corrió y metió más que los viñamarinos. Y quizás por ello que del 2-0 en favor de San Felipe, no hay nada que decir. El cuadro de César Vigevani hizo su pega, marcó en los momentos justos y volvió a meterse en la pelea, quedando a 8 puntos de San Luis.

El problema es para un Everton que de ganar se ubicaba segundo... y que tuvo en 90 minutos de juego, apenas dos ocasiones de gol. Efectivamente, dos míseras llegadas -para un equipo, se supone, con pretensiones como las que desperdiciaron Canío a los 13' (elevó su remate) y Miralles a los 78', que obligó a un gran manotazo al meta Claudio González.

Por contrapartida, San Felipe tuvo varias ocasiones como el testazo de Fernández (32'), el remate de Bustamante (42') y la media vuelta de zurda de Campos López en el primer tiempo (45'), más otra farra aconcagüina en la segunda mitad con los tiros elevados de Campos López (66'), el tiro libre de Miranda (69'), el testazo de Muñoz (72') y los tantos perdidos por Sirino y Domínguez a los 86' y 87'.

GAnaron al medio

Como se puede advertir, la justicia en el triunfo de San Felipe no merece discusión. Pero, ¿qué pasó con Everton?. Primero que todo, perdió el mediocampo en donde Mikel Arguinarena fue un fantasma, mientras que Alucema y Saavedra, siempre muy "chuletero", no estuvieron a la altura. Atrás, Estay tuvo muchos problemas en la marca, Toranzo tampoco fue una gran solución mientras que arriba, poco lo de Ceratto y Miralles y nulo el aporte de Canío, quien hace rato no juega o no aparece de acuerdo a lo que se conoce de él.

Por contrapartida, el cuadro sanfelipeño juntó a jugadores de muy buen pie como el sorprendente Juan Córdova (que reemplazó al lesionado Manuel Bravo), junto a Sirino y Droguett. Y entre los tres, volvieron locos a los viñamarinos y configuraron una victoria que caló hondo en la Ciudad Jardín. J