El insólito interés por los cachureos nazis en Valpo
Cachurear por la feria de antigüedades en Plaza O'Higgins es uno de esos placeres que los porteños nos podemos dar durante las mañanas dominicales. Entre tanto cachivache siempre se encuentra uno que otro artículo que llama nuestra atención, pero difícilmente exista un puesto que abarque tantas miradas como aquel que en sus productos tiene marcada la clásica cruz esvástica, símbolo del nazismo.
Cascos, gorros, álbumes de fotos, identificaciones, revistas y libretas de trabajo completan la colección que Juan Carlos tiene a disposición del público para su venta. "Me las traen directamente desde Europa, todo es original y tiene un alto valor para los coleccionistas de antigüedades", comentó el vendedor.
Sus artículos, que a veces también incluyen condecoraciones de la época (no tenía al momento de ser entrevistado debido a que se venden rápidamente), se expenden bastante bien en una feria que está a acostumbrada a recibir a distintos tipos de coleccionistas, aunque Juan Carlos asegura que esta venta ha bajado en los últimos años. "Antes era un boom, pero en los últimos dos años ha bajado un poco. Aún me va bien, pero la venta cuesta un poco más que antes", relató mientras atendía a un par de interesados en los cascos que vende.
Al ser de un alto valor histórico, los diferentes artilugios puestos a la venta tienen un precio acorde a lo que valen, por ejemplo, para que se haga una idea, para poder quedarse con alguna de las libretas de trabajo que Juan Carlos vende deberá desembolsar la no despreciable suma de $25.000.
compradores
Cualquiera pensaría que los compradores principales de estos peculiares objetos son grupos de gente con la cabeza rapada y con chaquetas de cuero con una esvástica cocida. Sin embargo, Juan Carlos rompe el mito señalando que "al menos abiertamente, nunca ha venido alguien que siga esta cultura a comprar alguna de mis cosas. Mis clientes predilectos son los coleccionistas de artículos de la guerra, chilenos, estadounidenses, japoneses, de todo. Vienen, ven las revistas, se llevan un casco o algo y después vuelven de nuevo". J