Argentinos tuvieron que dormir en sus vehículos
Reñaca ha sido por décadas el destino favorito de los argentinos. ¿La razón? porque es una de las pocas comunas que tiene el mar y la montaña juntos. Por eso, a los che les dio lo mismo esperar largas horas en el Paso Fronterizo Los Libertadores y que al llegar, no encontraran alojamiento en ninguna parte. A ellos simplemente les bastó pisar la región, ubicar un lugar seguro y acomodar el equipaje para poder dormir en sus vehículos.
Así lo consigna Ricardo Setién, un reñaquino que arrienda departamentos a turistas. "Soy dueño de una inmobiliaria y este año, sin exagerar, han venido muchos, pero muchos argentinos. La capacidad total la hemos copado con un 90% de argentinos y un 10% de chilenos. Este fin de semana se acabó el hospedaje y la gente tuvo que dormir en más de 200 autos que se estacionaron en los servicentros y alrededores. Estaba todo saturado", manifestó sorprendido.
Argentinos contentos
Cecilia Monroy, una simpática mendocina que llegó a Viña del Mar con su familia y amigos, señaló que el sacrificio siempre vale la pena. "Hemos venido varias veces porque nos encanta que el mar y la montaña estén cerca. Tuvimos que esperar unas ocho horas en el Paso porque no estaban todas las ventanillas abiertas, pero aquí en Reñaca está todo tan lindo, que uno no lo toma en cuenta. Veníamos sólo por dos días, pero al final nos quedaremos por cuatro", declaró la argentina. Agregó que sus panoramas han sido visitar el centro de día y en las tardes ir a la playa y hacer trekking.
Juan Manuel Kisluk, un turista de Córdoba, también está fascinado con sus vacaciones. "Hemos venido varias veces porque nos gusta mucho la zona por el paisaje, el mar, las montañas, los shopping, todo, todo muy lindo. La gastronomía también está muy buena. Llegamos el jueves pasado y nos quedamos hasta mañana (hoy), vinimos por lo que en Argentina se conoce el feriado de Carnaval, cinco días, ya que no hemos tenido vacaciones, pero cada vez que podemos venimos acá", indicó.
Respecto al cambio de moneda, los trasandinos sienten que acá pueden obtener más cosas.
"Es cierto que el cambio no nos favorece, pero acá son más baratos las compras, la bencina y las cabañas para arrendar. Y los días estuvieron muy bien, nos dejan pasear, durante la mañana hacer las compras y en la tarde, a partir de las cuatro, ir a la playa con los chicos", declaró Kisluk.
Aurelio Palazzo, otro argentino que llegó desde San Luis con su familia, comentó que no sentía mucho la diferencia "porque solemos ahorrar para nuestras vacaciones".
Ya hay disponibilidad
Si bien algunos de los che se tuvieron que ir a otras comunas por no encontrar habitaciones en los hoteles ni departamentos para arrendar, la mayoría de los que durmieron en los vehículos pudieron hacerlo al día siguiente gracias al recambio de turistas. "Ya se fueron varios hoy (ayer) en la mañana, así que se están desocupando lugares. Ahora mismo estoy llevando a unos nuevos inquilinos a uno de los departamentos. Es increíble, pero este año han venido menos chilenos a vacacionar para acá", aseguró Ricardo Setién. J