Ya es proverbial el olvido y el abandono con que nuestras autoridades mantienen a este barrio Recreo, parece que perteneciéramos a otro planeta. Vivo en Av. Amunátegui altura 1900 y por años padecemos con aceras en pésimo estado. Luces públicas apagadas, en la esquina de J. J. Latorre tenemos un cruce cebra que nadie respeta, todos pasan por aquí a exceso de velocidad. Hace falta un lomo de toro, pues también hay un letrero "Marcha lenta zona de escuela" que todos los motoristas ignoran. Y frente a mi casa hay un letrero "No estacionar", porque es zona de escuela y además ese espacio se necesita para que los camiones del aseo puedan llegar a los contenedores. Todos los días veo no menos de tres vehículos estacionados ahí, los más descarados aún suben una rueda al pasto que nosotros los vecinos mantenemos. Jamás, repito, jamás he visto por aquí un carabinero haciendo respetar la ley. Control de velocidad, respeto de paso cebra, disco No estacionar. Lo irónico es que tenemos una Tenencia de Carabineros a sólo cuatro cuadras de aquí, pero otra cosa es lograr sacarlos de ahí.

Ojalá usted encontrara espacio para publicar esta carta y a ver si nos cambia la suerte. Muchas gracias señor director.

Ignacio Acuña

El que todavía se escuche a Chopin, Beethoven, Mozart, Manns, Loyola, Los Jaivas, Prokol Harum, The Beatles y tantos otros, es una prueba más que cuando hay calidad, se nota y la misma gente la valora y la transmite en el tiempo generación tras generación, por lo que no necesitaron de una ley que obligara a escucharlos, ni nada que se parezca. Cuando un músico, un cantante, un grupo tiene un producto de calidad, fruto de su trabajo, creatividad y profesionalismo, no necesita obligar a nadie para ser escuchado, aclamado y comercializado, sólo el trabajo, la calidad y la perseverancia traen la inmortalidad musical, nunca una ley.

Luis Enrique Soler Milla