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"Loco de la motosierra" arriesga 80 años de cana

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Alegando total inocencia de los cargos, ayer se subió al estrado el hombre que el año pasado protagonizó un impactante hecho de sangre en Laguna Verde.

Según la acusación de la fiscal Mónica Arancibia, la madrugada del 20 de marzo de 2014 el contratista Pedro Daniel Gutiérrez Pereira, 34 años, llegó hasta la casa de su ex conviviente y madre de su hijo, Ana María Mendieta, la que estaba acompañada por su vecino Luis Jeldres y su amigo Cristián Guzmán. Este último era testigo en una causa de lesiones menos graves en contexto de violencia intrafamiliar donde Gutiérrez Pereira sería imputado ese día 20 en la mañana.

Pese a tener una medida cautelar de no acercarse a su ex, Gutiérrez llegó al hogar provisto de una motosierra y un cuchillo. Amenazó de muerte a los ocupantes, asegurando que iba a quemar la casa. Mientras Jeldres y Mendieta se ocultaron en una pieza, Guzmán salió a calmar a Gutiérrrez, que no pudo encender la motosierra, pero que luego atacó al testigo -que además era su amigo- con un palo en la cabeza, que le ocasionó un TEC fatal. Luego estrelló una camioneta contra la casa y con combustible le prendió fuego. Cristián Guzmán murió carbonizado y la pareja sobrevivió con herida menores.

PRESO DE POR VIDA

La fiscal Arancibia pide las siguientes penas con las agravantes de premeditación y alevosía: presidio perpetuo calificado (40 años) por homicidio calificado de Cristián Guzmán, 20 años por femicidio frustrado de Ana Mendieta, 15 años por homicidio calificado frustrado de Luis Jeldres, 5 años por desacato y 540 días por amenazas. Este último delito lo habría cometido en julio de 2014, luego que Gutiérrez llamara desde la cárcel a Jeldres, advirtiéndole que mandaría a dos tipos a matarlo.

El Sernam es querellante en esta causa. En el algeato de apertura, la fiscal señaló que con los testimonios de los sobrevivientes y peritos de la BH y otros especialistas, se acreditará la culpabilidad del acusado. El defensor, Rodrigo Durán, señaló que el único delito establecido es el desacato, y que los cargos restantes se basan en relatos inverosímiles, contradictorios e inconsistentes.

Pedro Gutiérrez subió al estrado negando de plano los delitos. Declaró que el día anterior al hecho su ex Ana María junto a su actual pareja Luis Jeldres -"a los dos los pillé engañándome", dijo- lo insultaron y agredieron con palos y fierros afuera de una botillería, y que después hicieron lo mismo en su casa. Hizo una denuncia en carabineros. Negó portar la motosierra y ser el causante del fuego. "Fui a buscar a mi hijo y Cristián me tiró la camioneta encima. Yo hice un hoyo en la pared para que Ana y Luis pudieran escapar. Después me fui y al día siguiente me entregué a la PDI", afirmó el sujeto, que si es condenado se expone a estar de por vida tras las rejas. J

Fin a clandestino de copete que "la llevaba" en parte alta de Rodelillo

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l Un surtido clandestino de expendio de alcoholes fue desbaratado por Carabineros en Rodelillo.

Personal de la SIP de la Tercera Comisaría Norte recibió reclamos de vecinos, respecto de un comerciante domiciliado en el pasaje Río Loa de la población Básica, que las 24 horas vendía licor en su vivienda a los sedientos, que se juntaban en el lugar a beber y fumar droga, provocando desordenes, riñas y otros delitos asociados. Los uniformados comprobaron la veracidad de la información al ver clientes comprando de madrugada. Se entrevistaron con J.A.A.S., de 67 años, alias "El Canilla", el que fue multado y citado al juzgado de policía local. Se le incautaron 24 envases de vidrio de cerveza de litro, botellas y cajas de vino, así como botellas de ron, pisco, champaña, entre otros licores, los que fueron remitidos a la Caja de Crédito Prendario. J

Cultivaba plantas de yerba en su antejardín

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l A vista y paciencia de los vecinos un sujeto cultivaba marihuana en el cerro Mariposa.

Personal de la SIP de la Octava Comisaría Florida patrullaba por la escala Vergara, cuando fueron alertados por residentes que en una de las casas el propietario mantenía plantas de marihuana en proceso de crecimiento. Fueron al inmueble y en el antejardín los uniformados descubrieron cinco matas de cannabis sativa de 1.60 a 1.70 de altura. Allí se contactaron con J. M.R.B., de 54 años, que reconoció que las especies eran suyas, y que al interior de su morada había más droga en proceso de secado. Le decomisaron 460 gramos de la sustancia ilícita. Fue enviado al tribunal de garantía por infracción a la ley 20.000. J