Malditos quemaron peluches en la animita de Panchita
Cuando la llamaron para contarle la triste noticia no lo podía creer. Verónica Espinoza Rojas, abuela de Francisca Silva Benavides, no encontraba explicación para lo que le hicieron a la animita de su nieta, fallecida trágicamente durante el mes de agosto del año 2009, a manos de Juan Saavedra a la edad de cinco años.
Y es que la estructura para recordar a la pequeña, la cual fue instalada en el sector de la Piedra Feliz en Valparaíso, con el paso de los años se había transformado en una especie de santuario dedicado a la devoción de la menor.
Sus seguidores llegaban en forma constante a dejar agradecimientos por favores concedidos y también una gran cantidad de peluches, que con el tiempo sumaron más de 500.
Eso hasta que hace un par de días los peluches que acompañaban la animita de la menor fueran completamente quemados por desconocidos.
Una vez que se enteró de la noticia, Verónica Espinoza, abuela de Panchita, se trasladó hasta el lugar para comprobar con sus propios ojos lo ocurrido.
"Es terrible, no encuentro palabras ni explicaciones para esto que pasó", señala a La Estrella de Valparaíso, Verónica.
"No sé quién pudo hacer algo así. Como suele ocurrir en estos casos nadie vio nada y nadie sabe nada de lo que pasó. De lo que sí tengo certeza es que las personas que hicieron esto provocaron un daño muy grande, justo en una época especial como la Pascua", agregó la mujer.
Según el relato de Verónica, justo el domingo pasado los padres de Panchita fueron al cementerio para llevarle, como todos los años, sus huevitos de chocolate.
"Ellos (los padres) pensaban venir durante la semana para este lugar, pero la verdad es que no deben venir porque les hará muy mal", señaló Verónica.
viejas heridas
Para la abuela de Panchita no sólo se hizo un daño material al quemar los peluches instalados en la animita, sino que también un daño tremendo a toda la familia de la pequeña.
"Con esto lamentablemente se abren viejas heridas de lo que fue el dramática hecho. Nos ha costado mucho reponernos, la madre de Panchita aún está bajo tratamiento, y este tipo de cosas lo único que hacen es abrir las heridas del pasado", dijo la mujer.
Agregó: "tal vez fueron algunos angustiados que se ponen a tomar o a fumar acá o simplemente alguien que nos quería hacer daño. Sea como sea lo que hicieron no tiene perdón".
Pese a la tragedia del atentado en contra de la animita de Panchita la fe de sus seguidores se mantiene intacta, ya que a pocas horas de ser quemados la totalidad de los peluches de la menor, ya se pueden apreciar algunos pocos que han sido puestos en el lugar.
"Nosotros pensábamos que íbamos a encontrar todo quemado y sucio, pero parece que alguien limpió, alguien que le tiene respeto y cariño a mi nieta. Todavía hay mucha gente que cree en ella y le pide cosas, nos pone muy contentos que sea así porque ella era una niñita muy especial", señaló la abuela de la menor fallecida. J