En un completo desastre quedó transformada la vivienda de don Héctor Guzmán, un antiguo propietario de calle Esmeralda en la parada 27 de Quilpué luego de que una rotura de matriz dejara su casa transformada en un verdadero río de fecas.

Esto ocurrió el pasado miércoles a eso de las 10.00 de la mañana cuando trabajadores de la empresa la constructora Viconsa que construyen una torre de 22 pisos frente a la vivienda de don Héctor, rompieron accidentalmente una matriz de agua y ésta escurrió hacia la calle y las casas aledañas.

"Se rompió la matriz de un alcantarillado de una construcción que están haciendo en el cerro al frente de mi casa, se taparon todos los alcantarillados de las calles y se inundaron algunas casas, especialmente la mía que fue la más perjudicada. Era un río que de agua potable mezclada con agua servida que recorrió mi casa desde la calle hasta el patio", señaló el vecino.

demanda

Todos los muebles y artefactos de Héctor Guzmán se vieron afectados y, al ver el desastre, la empresa envió a su domicilio una cuadrilla de unos 20 trabajadores para que limpiaran el desastre que había quedado. Para ayer se esperaba que una empresa realizara una sanitización a la vivienda.

Trabajadores de Esval llegaron al lugar, ellos limpiaron y destaparon los alcantarillados para que esta situación no se volviera a repetir, sin embargo, según comenta él y otros vecinos, esta no es la primera vez que ocurre desde el inicio de la construcción, pero la intensidad de las veces anteriores no había sido la misma de esta vez.

"Me dañaron todos los muebles, quedaron flotando, aparentemente no hay artefactos quemados, pero hay cosas como la lavadora que no he ocupado porque el agua la cortaron, pero espero que se hagan cargo de todo. Por esto yo presentaré una demanda a Esval y ellos tendrán que ver de quién es la responsabilidad", relató.

La Estrella llamó a la empresa Viconsa para hablar con el gerente, sin embargo, se informó que estaba en terreno. J

l Alertado por los maullidos que ha escuchado -tanto de día como de noche- en las últimas jornadas (los que provienen de un orificio ubicado en el acceso a su casa, en Viña del Mar) y ante la nula presencia de personal de Bomberos y Seguridad Ciudadana, a quienes asegura, ha llamado en varias oportunidades, el vecino viñamarino, Juan Estay, se comunicó con La Estrella para denunciar la presencia de un gato atrapado hace tres días en un pequeño respiradero, sin aparentemente, poder escapar del lugar.

El hecho denunciado por el dueño de la casa ubicada en calle Crucero N° 50 ha generado preocupación entre los vecinos, quienes poco pueden hacer para rescatar al animal. J