l Fue un partido parejo, con ocasiones en ambas puertas y que dejó la llave totalmente abierta para la revancha del miércoles en San Carlos de Apoquindo entre la Universidad Católica y O'Higgins de Rancagua. Un 2-2 analizado con cautela desde ambos bancos, ya que ninguno sacó ventajas en el juego de ida mas bien cambiante, ya que si bien la UC estuvo en ventaja durante largos pasajes del encuentro, también lo pudo perder sobre el final.

Para Mario Salas, técnico visitante en este caso, el resultado fue mezquino.

"El empate, personalmente, me deja con gusto a poco. Creo que Católica mereció quedarse con el triunfo y sin duda, es un resultado mezquino para nosotros", reseñó el adiestrador.

En ese sentido, Salas argumentó: "No nos generamos muchas ocasiones de gol, pero las que tuvimos fueron muy claras para aumentar el marcador, y que no hayamos podido hacerlo, sin duda se debe al rendimiento de (Jorge) Carranza y de la línea defensiva de O'Higgins".

En tanto, para el DT local, Pablo Sánchez, la llave sigue abierta para cualquiera. "Contento con el trámite del partido y con la voluntad del equipo, primero de ir a buscar el empate, de haberlo conseguido y luego habernos puesto en ventaja. Lamentablemente, nos quedamos con un 2-2 que deja la clasificación (serie) totalmente abierta", remató. J

En un partido en que las tapadas de Lucas Giovini eran celebradas por los hinchas caleranos -ya que mantenían una derrota remontable en la vuelta- al final, el premio fue mayor para el conjunto rojo. Juan Manuel Tévez repitió la gracia de El Salvador y en el último suspiro sentenció el empate con que Unión La Calera regresó desde Arica.

Una igualdad que atormentó a todos en San Marcos, pues les volvieron a birlar un triunfo en la agonía como les ha pasado varias veces este semestre. Justo cuando Kevin Harbottle había continuado con su mini racha frente a Calera tras las dos dianas del escurridizo mediapunta en el anterior duelo entre ambos.

Pero en un partido que costó que se abriera y que en general no satisfizo a los espectadores, las bancas tenían mucho que decir, ya que tanto Fernando Vergara como Ariel Pereyra contaban con variantes ofensivas para recurrir en el complemento. La apuesta del entrenador nortino fue Nicolás Medina, quien estuvo cerca de liquidar con un segundo gol ariqueño.

Al estratega calerano en tanto, los cambios le salieron a pedir de boca. La maniobra del postrero empate de Tévez fue gracias a una pelota larga que peinó Ramiro Costa. Ambos delanteros habían reemplazado a Vidal y Pineda.

ARICA LOS COMPLICÓ

Pereyra prefirió apuntar a las virtudes del elenco local para explicar por qué se vieron superados en varios tramos del partido. "No creo que el equipo haya bajado su nivel, lo que pasa es que Arica tiene jugadores que por momentos te hacen ver mal, tienen un juego muy directo que complica con jugadores muy potentes. De un lateral nos convierten y lo habíamos trabajado, porque con Audax habían marcado un gol parecido", reconoció el DT mendocino.

"Lo importante es que seguimos con la llave igual a como empezó, ahora tenemos que trabajar para cerrar este enfrentamiento en casa ante un rival fuerte. Ellos nos ganaron las segundas pelotas en el mediocampo, en que nosotros rechazábamos pero no reteníamos el balón. Eso nos complicó", manifestó el técnico calerano, tratando de detectar lo que deben mejorar de cara a la revancha de este jueves.

El Fantasmita destacó el que sus dirigidos no bajaron los brazos y lucharon hasta el final por cambiar el resultado, porque "eso es lo que ha caracterizado a este grupo durante todo el año, así que felicito a mis jugadores por el esfuerzo. No era fácil, tienen muchas cosas en la cabeza, lo que viene, que pueden quedar en la historia. Es una ansiedad difícil de manejar". J