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Así eran los estudiantes que murieron baleados en Valpo

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Entre gritos de rabia y dolor, partieron de este mundo Exequiel Borvarán Salinas (18) y Diego Guzmán Farías (24), los dos estudiantes de la Universidad Santo Tomás (UST) que este jueves fueron baleados desde una azotea ubicada en el sector de la Plaza Victoria.

Exequiel, quien al igual que Diego era hincha acérrimo del Colo Colo, había estado con sus amigos haciendo malabares para amenizar la marcha, pero jamás imaginó que por querer colocar un lienzo en un edificio, se podría meter en tantos problemas. Por esto, Andrés Sebastián, uno de sus cercanos, está impactado. "El Kelo (así le decían de cariño) era muy buen amigo. Era alegre, sencillo y 'apañador'. No hacía graffitis como han estado diciendo (en algunas noticias), él sólo era malabarista y una persona tranquila. No tenía por qué morir", expresó.

El joven, que vivía en Quilpué, frecuentemente era visto en la Plaza Vieja de la comuna, practicando algunas piruetas. Estaba estudiando su primer año de Psicología y aunque no tenía novia, sí tenía muchos amigos. "Kelito, no puedo creer esto, vuela alto amigo mío. Siempre te voy a recordar bro y espero que allá arriba estés haciendo tus malabares y me estés esperando con ese abrazo que siempre me dabas cuando llegaba a la plaza (sic)", le escribió Matías Ignacio Ruiz en su Facebook.

Kevin Valderrama también le dejó un mensaje recordando el último momento que compartió con él. "Hoy (ayer) estuve contigo toda la mañana sin imaginarme que no te podría saludar al otro día. No tengo palabras, vuela alto hermano (sic)", expresó.

Últimos minutos

Matías Tapia, el amigo que estuvo con Exequiel en los últimos minutos de su existencia, estaba desesperado. Cuando vio que su compañero estaba tirado en el suelo convulsionando y que rápidamente una ambulancia se lo llevaba al hospital Carlos Van Buren, intentó ubicar a los familiares por Facebook. "¿Algún conocido del Kelo que tenga el número de algún pariente, por favor?, es de suma urgencia, estoy acá en el hospital... Le acaba de llegar una bala perdida en el cuello... Por favor, dejen algún número (sic)", manifestó en la red social.

Sin embargo, Exequiel murió a los instantes después y Matías no lo podía aceptar. "Kelo, tu muerte no será en vano. Hace 2 horas estaba contigo haciendo malabares y no puedo creerlo, te me perdiste y cuando te vi, no sabía qué hacer. Hice todo lo que pude para prestarte ayuda y ahora haré todo lo posible para que se haga justicia (sic)", afirmó.

El colocolino Diego Guzmán se encontraba estudiando la carrera de Prevención de Riesgos en la UST y era secretario comunal del Partido Comunista (PC) de Quillota. Estudió en el Colegio Nuestra Señora del Huerto y mantenía una relación sentimental con una quillotana llamada Francisca. Recientemente había terminado su práctica profesional y le quedaba muy poco para terminar sus estudios.

Cargo reciente

El cargo como secretario comunal del PC lo había asumido hace tres semanas. Nicolás Donoso, uno de los adherentes del partido, señaló que se hizo una conferencia para elegirlo. "Él tuvo un crecimiento político gigante, llegó súper 'pollo' hace años. Venía con muchas ganas de aprender y leer, siempre andaba con un libro y quería hablar en los carretes de lo que había leído. Se manejaba bien en las cosas técnicas del partido, ideas", señaló Donoso.

Por lo anterior, el quillotano participó activamente de las campañas de Iván Villegas a concejal y de Reinaldo Barriga tanto por el concejo municipal como a Core, ambos candidatos del Partido Comunista.

Desde el Colegio Nuestra Señora del Huerto, en donde egresó en 2009, lo recuerdan como un chiquillo tranquilo y que uno de los apodos que tenía era "El Pulpo" porque le gustaba participar en cuanto evento se hiciera en el establecimiento. "Él era piolita, un chico muy tranquilo, alegre, buen muchacho. Le gustaba el fútbol y era muy querido por su grupo", relató Víctor Valencia, uno de los trabajadores del recinto.

Fue en este mismo lugar donde conoció a Francisca, el eterno amor de su vida y con quien compartió hasta el último día de su vida. La Estrella se puso en contacto con ella y comentó que iba viajando a Valparaíso y que estaba muy afectada y choqueada con lo sucedido.

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