Incorporarse a un nuevo trabajo puede transformarse en una situación estresante, pero también puede entenderse como una nueva oportunidad para desarrollarse en el ámbito profesional. Nuevos compañeros, jefes y deberes, son los que se encontrarán en el camino, por lo que hay que tener en cuenta una serie de aspectos para sobrellevar el cambio. Por ello, la gerente general de Laborum, María Angélica Zulic, entregó una serie de consejos para enfrentar esta importante etapa:

Cuando entres a tu nuevo empleo, fíjate en ver en qué consisten las dinámicas de tus compañeros y jefes, ya que esto te ayudará a adecuarte mejor.

Si tienes dudas respecto al funcionamiento de la empresa o la ejecución de ciertas labores, no tengas temor al preguntar cómo hacerlo. Esto demostrará que quieres cumplir las tareas, de acuerdo a los protocolos.

Si hay labores que nadie está haciendo y podrían ser de tu interés, o algún compañero necesita ayuda con algo en que puedas ser de utilidad, ofrécete a realizarlas, así quedará de manifiesto que eres proactivo.

Llega con ánimo, saluda a tus colegas y muestra tus ganas de aprender y de adquirir mayores responsabilidades al interior de la compañía.

Esto también ayudará realizar las tareas de manera más fluida, ya que se contará con el apoyo de otras personas que tienen más experiencia.

Es normal sentir nerviosismo los primeros días, pero no debes dejar que te superen. Si cometes un error, explica la situación e inténtalo nuevamente, así podrás demostrar profesionalismo, una cualidad muy valorada. J

l Según un informe de la Cepal, Chile es el tercer país de América Latina con el mayor número de mujeres con ingreso propio, por detrás de Uruguay y Argentina. El estudio devela que sólo el 23% de las mujeres de 15 y más años encuestadas reconoce no tener una fuente de ingreso propia. El 77% restante, en cambio, aseguró sí tenerlo. El número creció con respecto a años anteriores.

Dentro de la región, el promedio es que el 30% de las mujeres no tenga una fuente de dinero. En Uruguay, sin embargo, la cifra es de apenas el 4,5%, mientras que en Argentina el número sube al 22,8%. J

l La muerte de dos hermanos Rodrigo Menchaca, de 10 años, y Adair Rolando Mur Menchaca, de cinco, en un taller textil clandestindo de la localidad Flores, ubicada en el centro de Buenos Aires, fue la razón por la que miles de personas marcharon la semana pasada en contra de la esclavitud. La movilización comenzó justamente en el taller y tuvo como lema "Ni cadenas explotadoras ni clausuras policiales, abramos los talleres al trabajo digno". Los niños murieron a fines de abril producto de un incendio, mientras trabajaban en el sótano del taller. Además, un policía resultó herido. J