Fue la tarde del viernes y con la excusa del partido amistoso entre Chile y El Salvador que un supuesto hincha de la Roja llegó hasta el Edificio Solar del Valle, ubicado en pleno corazón de Quilpué. Aprovechó que el portón eléctrico había quedado abierto tras la salida de una residente. Así un joven de aproximadamente 24 años ingresó hasta la conserjería y afirmó que venía de visita al piso 18 para ver el partido.

Como no supo identificarse el conserje no lo dejó ingresar. Sin embargo, como el supuesto hincha estuvo un buen rato explicando a qué y dónde venía, el conserje no pudo percatarse, como luego lo confirmarían las imágenes captadas por las cámaras de seguridad, que dos sujetos provistos de mochila, ingresaron sin dificultad a la torre B del mencionado edificio.

En este lugar y tal como lo registraron las cámaras, los sujetos se dirigieron directamente hasta el piso 16 y provistos con una especie de ganzúa, forzaron la puerta de ingreso al departamento 1601 que a esa hora se encontraba sin sus moradores.

Los dos sujetos fueron directo hasta los equipos electrónicos: se llevaron consolas Wii, cámaras fotográficas digitales, parlantes, notebooks, todo avaluado en cerca de 2 millones de pesos.

Lo más preocupante para los dueños de casa, fue que entre las especies que sustrajeron los antisociales se encuentran los documentos y las llaves del auto del propietario.

"De lo que se llevaron lo que más me preocupa es la documentación del auto, todo lo demás - las tarjetas - están bloqueadas", comentó David Guerra, dueño del departamento y quien desde el viernes se encuentra afectado por una disfonía nerviosa ocasionada por el schock del robo.

Su nuera, Debhora Andaur, estudiante universitaria y madre de un pequeño niño, añadió que providencialmente ese día no llegó a la hora de costumbre al departamento pues al pasar a buscar a su hijo al jardín, la educadora le pidió unos minutos para hablarle.

"Si llego unos minutos antes me los encuentro dentro del departamento. Cuando llegué fue impactante: la puerta estaba destrozada, las luces encendidas y todos desordenado. Fue muy violento", detalló la joven quien si bien reconoce que el robo al departamento en el que habita junto a su pareja, su suegro y su hijo pudo ser fortuito, igualmente no les deja de llamar la atención que los sujetos que ingresan lo hagan directo a ese departamento.

La joven añadió que el departamento vecino se encuentra sin moradores desde hace algún tiempo, situación que bien pudo estar en conocimiento de los antisociales que les robaron. J