l Un importante crecimiento del síndrome de déficit atencional en los niños de Villa Alemana ha detectado una especialista en el tema.
Verónica Arcos es sicóloga y terapeuta en medicina natural con tratamientos con Flores de Bach y biomagnetismo. Se desempeña en el Cesfam Juan Bravo Vega, y cuenta que de un tiempo a la fecha planteles educacionales derivan masivamente al centro asistencial, a menores con este diagnóstico, los denominados niños problema o conflictivos. "Tienen muy baja tolerancia a la frustración, hacen pataletas, pelean con compañeros, se paran mucho del asiento y son muy desafiantes, no siguen las órdenes del profesor. Tienen problemas de concentración y bajo rendimiento", explica.
En promedio los pacientes fluctúan entre 6 y 10 años y prevalecen los varones. Las mujeres que sufren del trastorno son más distraídas, pero sin hiperactividad. El tratamiento tradicional implica el consumo del medicamento Metilfenidato, que actúa en el sistema nervioso - en el lóbulo frontal- inhibiendo la conducta del niño y mejorando su atención y concentración. Algunos padres le temen porque dicen que vuelve "zombies" a sus retoños. Verónica Arcos prefiere lo natural a los químicos. En la atención primaria de Salud de Villa Alemana desde 2013 se implementó un Programa de Medicina Complementaria con Flores de Bach. Dice que los resultados tardan un poco más que el medicamento, pero se modela la conducta y se controlan las emociones. "Ha sido todo un éxito, hemos dado muchos niños de alta y los padres se involucran en el tratamiento", resalta la joven profesional. El déficit atencional se acentúa con el uso exacerbado de tecnología como computadores, celulares y videojuegos, que se convierten en niñeras que cuidan y tranquilizan a los niños gran parte del día. Por ello la sicóloga aconseja a los cuidadores (padres, abuelos, nanas, etc.), establecer horarios, responsabilidades, normas y castigos, para que no haya un contraste entre lo que ven en el hogar con lo enseñado en el colegio. J