Ha tenido que madrugar esta semana para atender a los equipos televisivos que han llegado a su casa para hablar de David y la Selección. Dicha situación no le molesta, pero si le incomoda un poco, pues los Pizarro Cortez siempre han sido "quitados de bulla". Por eso a quienes conocemos a la familia de David, fue extrañamente reconfortante ver dos días seguidos a los padres y hermana del futbolista en matinales de la televisión abierta.

El lunes aparecieron en Mega y ayer en Canal 13 con Tonka y Martín en Bienvenidos. "Lo que más me ha costado es levantarme temprano", comenta de pasadita la señora María Elena Cortez, mamá de David, quien ha deslumbrado en cámara con sus anécdotas y esforzada vida con múltiples carencias económicas.

su hermana CLAUDIA

Últimamente la madre del "Fantasista" no ha andado muy bien de salud. Sufre de diabetes y ha estado algo descompensada. Dice que hay días que no se quiere levantar. Es que aún siente mucho la muerte de su hija Claudia, la regalona de David, quien falleció en diciembre del 2012 y fue la gran responsable de que el porteño retornase a la Selección.

"Ellos eran un ejemplo de hermanos, si yo muchas veces no entendía lo que ella me quería decir, pero David era capaz de traducirle todo", recuerda María Elena, quien también estuvo muy preocupada por su hermano Ramón, quien ha sido como un padre para ella.

Claudia sufría del Síndrome de Prader-Willi (SPW), enfermedad genética que se complicó con su diabetes y finalmente le quitó la vida a los 32 años.

"La Guatona", como le decía cariñosamente David a su hermana, fue la gestora de que el volante retornara a la Roja el 2013. Ella habría dejado una carta solicitándole a David que vistiera la camiseta de la Selección nuevamente y él accedió.

nueva faceta

Tras años de estar calladitos, con pocas apariciones en televisión, los padres y hermana de David optaron por aceptar las invitaciones que por años les hacían los programas de televisión, y ahora María Elena es conocida en todo Chile por su sinceridad y mano dura con que crió al caturro.

-Fue por culpa de Raúl "Chichi" Aravena, ex DT de David. A él lo contactaron de la tele y llegó hasta nuestra casa; yo no quería nada, pero en la iglesia le pregunté a nuestro Pastor y él me dijo que hablara no más. Entonces yo me comprometí con Bienvenidos y luego supe que mi hija había hablado con Mucho Gusto.

-¡Nooooo! , ¡Jamás!, pero acá no manda él. En esta tierra él puede ser mucho, pero aquí guapeo yo.

La historia de los Pizarro-Cortez es bastante conmovedora. María Elena y David se casaron hace 38 años y el jugador nació cuando su madre tenía 19 años. Venidos de familia de pescadores, María Elena nunca estudió una profesión y el poco dinero que ingresaba al hogar no alcanzaba para los pasajes y/o entradas para ir a ver a David al estadio. Ella en Tv ha contado los malabares que tenía que hacer para entrar al estadio (se escondía en el baño antes que abrieran las puertas) y con cero peso bajaba caminando -con zapatos más chicos y regalados- a la Alejo Barrios. Allí desde la tribuna le gritaba a David: "¡Suelta la pelota!" y nunca dejó de acompañarlo.

"A mi no me duele haber tenido tanta miseria, pues me hace lo que soy. Me hace fuerte, respetuosa y digna. Una persona puede tener muchos lujos, pero si tienes carencia humana eres pobre. Yo tengo un buen pasar, no tengo deudas, pero no tengo dinero. Pasa que toda mi vida he sido ordenada, aterrizada", cuenta la mamá del playanchino, la misma que guió los pasos del crack que esperan los wanderinos, pero que sabe que con la muerte de su hija Claudia aprendió a ser más cariñosa, más de piel y decir lo que siente.

Regreso a Wanderers

Tanto María Elena como David papá y Camila (ver recuadro), saben que la decisión de volver a Wanderers, le pertenece al 100% a su hijo. Sin embargo todos en la casa coinciden que aún no es el momento de que el volante regrese al Puerto.

Creen que tiene posibilidades de jugar más años en Europa, donde la vida no es tan linda como se ve, dice María Elena, que en sólo dos ocasiones lo ha ido a visitar a Italia, pero pudo advertir que lo vigilan hasta lo que come. "No es vida", comenta la progenitora.

"David es muy profesional, se acuesta temprano, nunca lo van a ver saliendo por la noche y hasta en la comida es riguroso. Yo a veces le digo que le tengo alguna cosita para comer y él no acepta. Es que apenas llega al aeropuerto lo pesan. Es muy triste su vida, no disfruta. Por eso yo no quise ir más. No puede salir con nosotros, sólo días puntuales, a las 10 de la noche debe estar en la casa, noooo... allá no son personas, sino objetos", confiesa María Elena.

Anécdotas

Además de comentar que no le gustó que David se expresara con chilenismos sobre el caso de Gonzalo Jara-Edinson Cavani, en la casa Pizarro Cortez recuerdan con extrema claridad el primer sueldo de David: 70 mil pesos.

"Me llamó el gerente Carlos Pérez y le arregló su primer sueldo, 70 mil pesos; 10 para él y 60 para mi (se ríe), mientras que el segundo fue de 360 mil. Ahí me creció un poco el pelo, sacaba 300 y le dejaba 60", revela con picardía la estricta y sociable mamá del crack.

Pero también se acuerda cuando el club quiso sacarlo de Playa Ancha y llevárselo a un departamento en Viña. "Yo les rayé la cancha y les dije que si creían que David era una cómoda de mi casa. ¿Qué se yo cómo se va a criar allá?, al lado mío va a crecer bien", confesó la matriarca.

Cuando juega Chile increíblemente la familia no viaja a Santiago y ni se junta a ver el partido en casa. Doña María Elena se encierra en el segundo piso y ni siquiera prende la tele, mientras su esposo e hija van donde unos tíos a verlo. Tampoco acuden a Juan Pinto Durán a visitarlo. Es que esperan que David llegue solito a la casa, pues con 3 hijos: Davca (14 años), Bastián (13) y Ema (3 años), el tiempo es escaso.

Ellos, como su núcleo familiar más cercano, jamás se han aprovechado de las ganancias de David. De hecho han salido "pa' atrás", pues el año pasado, cuando a los pescadores de Quintero le dieron un dinero por el derrame de petroleo, a David papá lo discriminaron y no le dieron nada, por tener como hijo a esta figura de la Selección y de la liga italiana. J