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El desafío de edificar en el paño de las ex petroleras

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Fue el año 2001 cuando la municipalidad de Viña del Mar, por entonces encabezada por el extinto alcalde Jorge Kaplan, celebró el acuerdo con las empresas petroleras para su retirada del terreno que por décadas ocuparon en Las Salinas. El año 2004 las empresas Shell, Copec y Esso iniciaron el traslado de sus instalaciones industriales.

Así entonces 16,8 hectáreas, señaladas como el último gran terreno disponible para construir frente al borde costero, quedaban libres y se iniciaba el proceso para su reconversión.

A inicios de 2013, Copec propietaria del terreno, anunció la elaboración de un Plan Maestro para el paño que la compañía posee en el sector de Las Salinas, iniciativa que está liderada por la filial Inmobiliaria Las Salinas.

En este sector se proyecta un desarrollo inmobiliario y de espacios públicos que configurará un nuevo rostro para Viña del Mar.

Pero el largo camino iniciado hace casi 14 años no ha estado exento de dificultades. La existencia de hidrocarburos en el vasto paño de terreno ha representado un punto de permanente alerta, fundamentalmente por lo que implica en materia medioambiental.

A fines de junio de 2014, Inmobiliaria Las Salinas ingresó al Servicio de Evaluación Ambiental el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) "Protocolo de Excavaciones y Condiciones para Edificar en Terreno Las Salinas". Lo que se busca es habilitar el paño para todos los usos aprobados en el plan seccional, es decir, residencial y equipamiento. En la actualidad el terreno está apto para uso como área verde y no para el pretendido desarrollo inmobiliario que se ha ido dibujando en el plan maestro.

Desde la empresa explican que los equipos profesionales que trabajan en el proyecto siguen avanzando en sus distintos aspectos y se ha reestructurado el cronograma inicialmente planteado.

"Esto implica que primero se ingresará e iniciará la tramitación del Estudio de Impacto Ambiental para culminar el proceso de remediación iniciado en 2001. En ese contexto, en junio se comenzó un proceso de muestreo en el terreno que se extenderá por alrededor de 3 meses", precisaron.

en 2016

Estos estudios, agregan, tienen como objeto actualizar y profundizar información que será base para el EIA. Dado lo anterior, la elaboración del Plan Maestro estará concluida en el primer semestre del 2016.

Asimismo Inmobiliaria Las Salinas ha informado que durante los próximos tres meses, se desarrollará en el terreno de Las Salinas un proceso de caracterización de suelos y de aguas, que permitirá actualizar la línea base del terreno y faja de playa frente a éste.

"Se obtendrá, de esta manera, información actualizada que sustentará el nuevo Estudio de Impacto Ambiental (EIA) que se presentará durante el 2016 y que apunta a levantar el riesgo remanente para garantizar la seguridad de las personas que vivan, trabajen y transiten en el futuro desarrollo urbano. Este proceso está siendo liderado por Golder, consultora internacional de amplia trayectoria en el país y en el extranjero".

Este trabajo de muestreo de suelos y aguas contará con la supervisión técnica de la Universidad Técnica Federico Santa María. J

Marco Ávila, arquitecto: "Valparaíso requeriría una normativa especial"

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Para el arquitecto y director de la escuela de Arquitectura de la Universidad de Valparaíso, Marco Ávila, en la región y en el país en general, no existe un concepto armónico entre desarrollo e identidad. En su visión, la construcción de ciudad no recoge los elementos de identidad de cada urbe, lo que provoca disonancia con proyectos que pueden resultar interesantes.

"Se requiere también de un proyecto integral porque siempre son proyectos, independiente de que sean proyectos muy grandes, son siempre iniciativas puntuales, inconexas unas con otras: mall Baron, terminal 2, mall de Viña, recta las Salinas, siempre son porciones, pero no existe una mirada integral de la ciudad y su desarrollo", plantea el profesional.

Desde su perspectiva, Ávila plantea que existen de sobra mecanismos en el mundo para poder generar un proyecto o una imagen de proyecto a largo plazo, pero un proyecto integral de ciudad.

"Cuando tú lanzas la ciudad, ponte tu al 2100; la lanzas con un proyecto de ciudad, con una vocación de una imagen a la que quieres llegar y en la que muchos actores van a querer estar presentes", aseveró Avila.

En este sentido, según este arquitecto quien debiese convocar a esta construcción de ciudad debiera ser el Estado,porque finalmente "se trata de visiones de país, visiones de Estado, visiones estratégicas macro de largo plazo, globales".

Valparaíso

Marco Ávila coincide con la idea de que la normativa jurídica no es suficiente para resguardar lo que él define como la "fragilidad de las ciudades".

"Quizás los instrumentos jurídicos con los que cuentan los municipios, por ejemplo, no son lo suficiente, no sólo para regular, sino también para dar facilidades a operaciones en que la ciudad gane. No sólo es un asunto que está tan instaurado en Chile que es el asunto fiscalizador, sino un asunto constructor, estructurador. Si tú le aplicas la normativa actual de la Ley General de Urbanismo y Construcciones yo pienso que el 80% de Valparaíso no existiría porque excede con creces lo que es la ciudad", plantea.

Para Ávila, ciudades como Valparaíso con una topografía que constituye su identidad y su valor patrimonial, requerirían de un marco regulatorio específico y particular.

"Pienso que ciudades como la nuestra, como Valparaíso en particular, requieren de una plataforma en que los proyectos que son estructurales a su desarrollo, converjan en un espacio destinado a pensar la ciudad (...) Valparaíso merece un marco regulatorio específico por sus características (...) Una regulación modélica, particular, especial que pueda ser replicable en otros lugares de Chile", manifestó el arquitecto. J