Una increíble escapada de la muerte tuvieron ayer un padre y su hija, luego que cayeran al paso del metrotren en la estación Villa Alemana.

El capitán Patricio Moya, subcomisario (s) de los servicios de la Sexta Comisaría, señaló que cerca de las 14.30 horas fueron alertados del incidente. Los datos recabados con testigos revelan que una mujer identificada posteriormente como B.P.G., de 25 años, se arrojó en forma voluntaria desde uno de los andenes a la vía con claras intenciones de quitarse la vida, cuando la máquina se acercaba a tomar y dejar pasajeros a la estación.

En forma instintiva su progenitor que la acompañaba, A.P.P., de 54 años, en su afán de salvarla se lanzó tras de ella, y ambos fueron impactados por el vagón 605 que se dirigía hacia el Puerto. Por un efecto de rebote los cuerpos saltaron al costado de la línea férrea sin ser arrollados por el vehículo. En el caso del varón sufrió la amputación de algunos dedos de una mano, mientras que su hija tuvo lesiones graves. Fueron llevados al hospital de Quilpué donde permanecen graves, pero fuera de riesgo vital. El servicio estuvo suspendido por cerca de una hora. El capitán Patricio Moya afirmó que en base a lo aportado por otra pariente directa que estaba con los lesionados en la estación, ambos tendrían problemas siquiátricos. Al maquinista se le practicó la alcoholemia de rigor, fue llevado al cuartel policial y después dejado en libertad.

otra versión

Una versión distinta entregaron los hermanos Andrés y José Miguel Piñones, cuidadores de vehículos en un estacionamiento a un costado de la estación. Fueron testigos directos de la escena y cooperaron en el rescate. Estaban shockeados por lo que vieron. "El tren venía frenando cuando el caballero y su hija discutían. El le dijo que se iba a tirar y lo hizo. Ella lo siguió detrás y lo alcanzó a impulsar para que no quedara debajo de la máquina", expresó Andrés. "Dicen que se lanzó por problemas amorosos", agrega su hermano José Miguel.

Los trabajadores resaltan que Carabineros y los servicios de emergencia llegaron a los pocos minutos. Aseguran que los guardias de Merval no reaccionaron a tiempo frente a la emergencia. "El caballero pedía no ser llevado al hospital de Peñablanca porque allá había muerto su suegra, quería irse a Viña", comentó Andrés. J