Secciones

Sus hijos: "Sí él esta feliz, nosotros estamos felices"

E-mail Compartir

Al regreso estelar de David Pizarro a Valparaíso, asistió toda la familia wanderina, quienes vieron con buenos ojos la vuelta del "Fantasista" y valoraron el aporte que puede entregar al equipo de cara a la Copa Sudamericana que arranca el 12 de agosto para Wanderers.

Moisés Villarroel, ídolo histórico del club, recalcó lo importante que es para el equipo recibir un refuerzo de tal categoría que pueda vertir en el plantel toda la experiencia que ganó jugando tantos años en Europa. "Para Wanderers, para Valparaíso y para el fútbol chileno es algo muy productivo e importante", señaló Villita. El ahora técnico también se refirió al ambiente familiar que se vivió en el estadio y el fuerte vínculo de la hinchada con el vagabundo retornado. "No todos pueden generar esto, el cariño de la gente por David puede traer de vuelta a la familia al estadio", expresó.

El presidente del club, Jorge Lafrentz, destacó la voluntad de Pizarro, quien desechó ofertas de otros equipos del viejo continente para volver a su club de origen. "Es un jugador totalmente vigente, nosotros competíamos con tremendos clubes que estaban interesados. Pero él cumplió su palabra y es un honor tenerlo de vuelta", señaló el dirigente.

Según palabras del mismo Pizarro, uno de los responsables de su vuelta fue el director deportivo de Wanderers, Juan Gutiérrez, quien en mayo viajó hasta Florencia para conversar directamente con él. "Quisimos demostrarle la intención del club , que queríamos contar con él y estábamos haciendo los esfuerzos", señaló Gutierrez.

sus hijos

Quienes estaban más contentos con el regreso de Pizarro, eran sus hijos, quienes lo acompañaron en la cancha. Davca (14), la hija mayor del porteño, dijo estar muy feliz de ver a su padre donde siempre quiso. "A él le gusta estar acá, siempre ha querido estar en Wanderers" contó la primogénita, quien reconoció que estaban acostumbrados a vivir en Italia, pero ya conocían Valparaíso cuando venían de vacaciones. En tanto, Bastián, su hijo de 12 años, confesó que es hincha de la U, pero manifestó estar contento por su papá. "Si él está feliz, nosotros estamos felices. Va a ser una emoción verlo jugar acá. Él siempre ha estado pendiente de lo que pasa con Wanderers", dijo el fantasista junior. J