Al canil de la sociedad protectora de animales en Laguna Verde, fueron remitidos ayer tres de los perros que se comieron parte del cuerpo de su amo fallecido, en el cerro Ramaditas.

A mediados de julio falleció Jorge Villar, de 55 años, en su casa de calle Esmeralda. Apareció carcomido por sus hambrientas mascotas. En el lugar quedó su hermano mayor Antonio, de ahí la preocupación de los vecinos que corriera igual suerte.

El municipio intervino a través del departamento del Medioambiente, que ayer llegó a la precaria vivienda a retirar a los perros. Kaiser, León y Rinti fueron capturados y un par escapó. "Hay una preocupación de los vecinos y no nos podemos desentender. Los llevamos a la Sociedad Protectora y ojalá tengan una segunda oportunidad", dijo Mauricio González, jefe del departamento, que lamentó que otros servicios públicos, en especial los de salud, no apoyarán a los residentes.

Las mascotas serán evaluadas para determinar su estado de salud y si son un peligro para las personas. Dejaron una jaula a los vecinos por si aparece otro de los canes.

cuerpo devorado

Eric Vergara, vicepresidente de la unidad vecinal N°99, dijo que el hallazgo del cuerpo devorado horrorizó al barrio. Temían que el hermano del fallecido -Antonio, que sufre de alcoholismo- terminara de igual forma, por lo que agradeció que el municipio haya intervenido. Señala que Antonio es una persona honesta y querida por los vecinos y necesita ayuda. El "Toño" como le dicen, tiene 75 años y se emociona al recordar que su hermano fue devorado por sus mascotas, situación de la que se enteró después de la tragedia. "Los manejaba muertos de hambre, no les daba de comer. Está bien que se los lleven", opina el hombre que vive en pésimas condiciones, pero que no quiere partir del lugar. Pide que lo ayuden a cambiar el piso de su hogar y tener caseta sanitaria. María Pérez, jefa del Departamento de Desarrollo Comunal, aseguró que Antonio vive en forma precaria, y se activó la red de salud y familiar para que lo apoyen y tenga acceso a servicios básicos. El municipio y los vecinos colaboraran para sacar desechos del inmueble y que acceda a caseta sanitaria. "La seremi de Salud hace oídos sordos a lo que le corresponde, y esto es lo que genera una situación tremendamente peligrosa en la ciudad. Aquí hay un hecho concreto donde deben llamar a Sanidad para que actúe", enfatizó el alcalde Castro sobre este caso. J