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Taxista vivió siete horas de terror al interior de maletero

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Todavía en estado de shock se encuentra Rigoberto Henríquez, un taxista de 69 años que el viernes vivió una verdadera película de terror, cuando tres sujetos lo secuestraron en su propio taxi por más de siete horas.

Los hechos comenzaron a desencadenarse a eso de las 13.30 horas cuando tres sujetos solicitaron los servicios de Rigoberto, en las inmediaciones del supermercado Tottus de Gómez Carreño, en Viña del Mar.

En el lugar los tipos pidieron a Rigoberto una "carrera" hasta el sector de Belloto Sur. "Al comienzo yo no sospeché nada porque fueron súper amables conmigo. Me conversaban de que iban a buscar una plata para ir a hacer una fiesta, todo en muy buenos términos", señala Rigoberto, al diario La Estrella.

Sin embargo el taxista de 69 años no sospechaba que al llegar a Belloto Sur lo que parecía ser un trabajo como cualquier otro, se transformaría en el peor día de su vida.

"Llegamos a una cancha abandonada y me hicieron parar. Me pidieron que me quedara ahí, mientras iban a buscar a un amigo. Incluso uno de ellos me dijo que me iban a pagar más por el tiempo de espera", señaló Rigoberto.

Para la sorpresa del viñamarino cuando los sujetos regresaron al automóvil el ánimo ya no era el mismo.

"El de adelante se tiró encima mío como un energúmeno; a él le decían 'El Tarro'. Los de atrás me agarraron y me pusieron una pistola en la cabeza y una cuchilla en las costillas para decirme que es un asalto", detalló el taxista.

En su desesperación Rigoberto clamó por su integridad física. "Les dije que se llevaran todo, pero que no me pegaran. No me hicieron caso y con la pistola me pegaron en la ceja y me la rompieron", detalló la víctima.

volante o maleta

Después de despojarlo de todas sus pertenencias los delincuentes le comunicaron a Rigoberto Henríquez que lo meterían a la maleta del taxi, porque tenían que "ir a hacer unos trabajos en el auto".

"Yo me negué porque soy operado de las dos caderas y en ambas tengo prótesis, por lo mismo era imposible que yo entrara en la maleta del auto. Yo les dije que no y me dijeron que me matarían. Yo les dije que me mataran no más, porque yo no me iba a poder meter en la maleta por mi problema en las caderas y mi contextura física", expresó el taxista.

Para su sorpresa, entre los tres delincuentes se pusieron de acuerdo para sujetarlo y meterlo dentro del maletero del taxi. "Cuando me metieron al maletero me pegaron de nuevo. Me pegaron con todo y a mí no me quedó otra más que entrar", dijo la víctima.

loca carrera

Una vez al interior del maletero del auto Rigoberto Henríquez, volvió a sentir que la muerte era algo que no podía evitar. "Ahí me asusté mucho porque no veía nada y estos tipos iban demasiado rápido. Pensé que nos íbamos a volcar o que el auto se iba a incendiar y que yo iba a morir calcinado sin poder hacer nada. Eso me dio mucho miedo, no quería morir de esa forma", dice emocionado a La Estrella la víctima de este violento robo con secuestro.

Rigoberto Henríquez confiesa que vomitó varias veces al interior del maletero del auto debido a las vueltas y la velocidad con que iba el taxi. Además, como pudo, desconectó los cables de los parlantes para poder oír lo que sus captores decían y hacían.

"Parece que no eran de acá porque escuché que varias veces le preguntaban a la gente cómo llegar hasta Viña. Después escuché que habían arrancado de un negocio y que los guardias los habían pillado robándole la cartera a una señora a la cual también le habían pegado", cuenta Rigoberto Henríquez, quien también escuchó cómo los sujetos contactaron a una mujer para conseguir drogas.

"Fueron hasta la Villa Independencia para buscar droga. 'El Tarro' ubicó a una tal Camila y ella lo llevó a comprar droga. Se drogaron ahí, en el auto, e imagínese después cómo andaban. Si antes ya eran locos para manejar ahora estaban peor. Yo pensé que ahí me moría, que íbamos a chocar y que moriría atrapado. Fue de horror, fue una pesadilla".

Cerca de las 20.00 horas del viernes y luego de pasar casi siete horas en el maletero del taxi, Rigoberto Henríquez sintió que el auto ya no se movía. Tampoco escuchaba la voz de sus captores. "Como a las cuatro de la tarde dieron la alarma por mi desaparición y secuestro. También la señora que asaltaron puso una denuncia en carabineros y los andaban buscando. Cuando sentí que ya no estaban comencé a gritar y un joven que escuchó mis gritos me liberó", finalizó el taxista quien asegura que "no la cuenta dos veces".

En cuanto sus captores, actualmente son buscados por la policía, mientras que la denuncia por robo y secuestro ya quedó interpuesta en la Fiscalía de Viña del Mar por el dueño del vehículo afectado. J