Una pesadilla vivió una familia porteña la noche previa a la conmemoración de los 42 años del golpe de Estado del 11 de septiembre, luego que vándalos sustrajeran su vehículo y le prendieran fuego en una barricada.

Jaime Squadrito reside en uno de los blocks de la villa Juan Pablo II, ubicada en el límite entre los cerros Rodelillo y Los Placeres. Casado, padre de tres hijos, trabaja para una empresa de Santiago.

Cuenta que la noche del jueves cuando se aprestaban a dormir, vieron algo sorprendidos que en la esquina del block de su hogar desconocidos encendían palos y neumáticos en la vía pública, algo inhabitual en el sector, ya que los desórdenes por lo general en esta época ocurren principalmente en distintos puntos de las avenidas Matta (Los Placeres) y Rodelillo.

Como la situación no pasó a mayores se fueron a dormir, pero cerca de las 02.15 horas de la madrugada un vecino del piso de su block los despertó en forma abrupta, alertando que la camioneta de Jaime fue sacada del estacionamiento y formaba parte de la barricada que interrumpía el flujo vehicular.

SE BURLABAN

Extrañado Jaime miró donde la aparcaba en la parte trasera del block y efectivamente no estaba. Se aprovecharon que la reja del portón de acceso vehicular al edificio no queda cerrado con candado, y empujaron el móvil unos 50 metros hasta situarlo en la esquina de calle Juan Pablo II y Escrivá de Balaguer.

Cuando salió del inmueble el trabajador constató que no había mucho que hacer. "La camioneta estaba totalmente envuelta en llamas. La luz de la calle estaba cortada, pero divisé la silueta de unos ocho menores de 20 años. Intenté acercarme, pero respondieron lanzándome peñascazos. Los tipos se burlaban diciéndome ¡ponte a llorar ahora weón!. Les parecía chistoso ver como se quemaba la camioneta", se lamenta el afectado.

A los pocos minutos llegó al barrio el carro lanzaaguas de dotación de la Séptima Comisaría de Fuerzas Especiales. El "guanaco" apagó las llamas de la barricada, incluida la camioneta que manejaba Jaime Squadrito.

Se trata de una Fiat Fiorino blanca, año 2012, propiedad de la empresa Booster Group, que se dedica a la importación, venta y comercialización de sistemas y maquinarias de refrigeración industrial.

SE QUEMÓ TODO

La víctima comenta que al interior del móvil guardaba un equipo de oxígeno y herramientas como llaves francesa, alicates, destornilladores, un equipo de soldadura, una sopladora, entre otros instrumentos que fueron sustraídos por los desalmados, y otros que resultaron calcinados. Las herramientas fueron avaluadas en más de 600 mil pesos. Mientras que el móvil siniestrado, que resultó con pérdida total, costaba unos 4 millones de pesos. La camioneta estaba asegurada por la empresa. "Tengo una sensación de mucha rabia porque es una herramienta más de mi fuente laboral, ahora quedo a pie porque en ella me movilizaba a todos lados. El 11 de septiembre es una excusa para estos actos, ni siquiera nacían estos pendejos. Los pillan y salen a la calle altiro porque son menores de edad. Lo malo es que acá nadie se hace responsable de lo que ocurre", reclama con razón el trabajador. Su esposa también se mostró dolida con la situación, y no esconde las ganas de emigrar a otro vecindario, en búsqueda de tranquilidad.

Carabineros del retén cabo 1° Juan Silva Toro de Los Placeres adoptó el procedimiento, pero no pudo dar con los responsables que arrancaron de manera cobarde por las quebradas aledañas.

Se dio cuenta del robo y posterior incendio al Ministerio Público, el que determinará las acciones a seguir. J