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Camionero quedó en pana en ruta Las Palmas y lo asaltaron

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"Les dije que se llevaran todo, que no me hicieran nada porque tenía hijos...". Así empieza su relato el conductor de un camión de contenedores que ayer en la mañana tuvo la mala suerte de quedar en pana en plena ruta Las Palmas, justo al frente del campamento Juan Pablo II, conocido por ser un sector peligroso en Forestal.

José Muñoz aún está nervioso y se quiebra pensando en su familia y en que afortunadamente salió con vida de ésta.

FALLA MECÁNICA

Eran cerca de las 6 de la mañana y José, oriundo de Putaendo, manejaba el camión de la empresa Eliseo con el que transportaba un contenedor con paltas. Venía de Hijuelas y se dirigía a San Antonio. Subiendo por Las Palmas sufrió un desperfecto mecánico que lo obligó a detenerse en la berma.

Recuerda que inmediatamente se percató del percance llamó a su jefe para contarle lo ocurrido. No había terminado de cortar la llamada cuando un sujeto con gorro apareció de improviso por su ventana pidiéndole cigarrillos. Como no fuma, le contestó que no tenía. "Me dijo entonces 'ya que no tenis cigarro tenis que entregar todo', me empapeló a garabatos y me apuntó con una pistola. Me exigió que abriera la puerta pero estaba bloqueada. Me decía que le entregara todos los dólares que tenía y le dije que no tenía", revivió el conductor.

Sin oponerse al atraco y con la idea de que su asaltante se fuera le entregó su billetera con 40 mil pesos. "Le dije que se llevara todo, que no me hiciera daño porque tenía familia", agregó José quien recuerda que en un momento pensó en darle una patada a su agresor, justo en el momento que por la puerta del copiloto apareció un segundo sujeto.

"Entonces pensé que no me quedaba más que estar tranquilo. Les insistí en que se llevaran lo que quisieran. Se llevaron un cooler rojo con comida, una radio. Hasta los zapatos que llevaba puestos querían llevárselos. Me trajinaron todo", explicó el conductor quien añadió que los sujetos actuaron con mucha violencia y amenazaron con dispararle porque él les explicó que no podía abrir el contenedor.

Los sujetos se fueron pero regresaron con otros dos o tres más. Venían con sacos y herramientas con las que sin embargo no lograron abrir el contenedor. En el intertanto José se había escapado y logró avisarle a un furgón de Carabineros que justo transitaba por la ruta.

"Los carabineros se detuvieron frente al camión, cruzaron y se agarraron a balazos con los asaltantes. Ellos también tiraron balazos y escaparon", precisó José.

El conductor de 47 años reflexionó sobre lo ocurrido, señalando que ya no hay quien se salve de la delincuencia.

"La delincuencia nos está atropellando a todos. Nunca pensé quedarme botado justo aquí, donde se sabe que es peligroso. Por aquí pasamos todos los días. No estuve ni 10 minutos parado y me colgaron", precisó.

A pesar de la mala experiencia, José piensa optimista que finalmente la sacó barata.

"Gracias a Dios estoy bien. Más de 25 años que soy camionero y primera vez que me amenazan con un arma. Fue horrible, uno se acuerda de la familia...", explica sin poder terminar la frase. J

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