La historia del chofer del auto que se maneja solo
Después que un amigo le recomendara unirse a un proyecto secreto de Google hace seis años, Brian Torcellini de repente se encontró en una paradoja laboral y se convirtió en el chofer de un auto sin chofer.
Torcellini, de 31 años, dirige un equipo de choferes de pruebas, o "de respaldo", quienes por ley deben conducir la flotilla de 48 "autos robot" de Google. Sólo toman el control durante emergencias. Si no, hacen observaciones que ayudan a los ingenieros de la compañía a programar los autos para que naveguen por las calles sin asistencia humana.
"Mucha gente va a su trabajo y se sienta en un cubículo", dice Torcellini. "Resulta que nuestro cubículo se mueve por las calles. Y si tenemos éxito, nos dejará sin trabajo".
Los autos sin conductor han sumado más de 3,2 millones de kilómetros en seis años de, en ocasiones, pruebas tediosas en pistas privadas, carreteras y calles citadinas ubicadas en su mayoría cerca de la sede Google en Mountain View, en California, EE.UU..
Como astronautas
Los vehículos viajaron más de la mitad de la distancia en modo autómata, con un chofer de pruebas listo para tomar control del auto si la tecnología falla o surge una situación potencialmente peligrosa. Mientras tanto, otro conductor se sienta en el asiento del pasajero tecleando notas sobre problemas que deben solucionarse y escenarios de tráfico que deben estudiarse.
"No me quiero comparar con un astronauta, pero a veces así se siente", dijo el piloto de pruebas de Google, Ryan Espinosa, mientras manejaba un Lexus automatizado. J