Con máquina acelerada se trabaja en los cementerios 1,2 y 3 de Valparaíso con el objetivo de llegar al 1 de noviembre, día de Todos los Santos, en las mejores condiciones posibles.

Sin embargo, algunos de los trabajadores del cementerio no están tan de acuerdo con el hermoseamiento que año tras año se le hace a los camposantos en vísperas de esta fecha, debido a que preferirían que los arreglos comenzaran desde adentro.

Así lo señaló Juan Avendaño, integrante del Comité Paritario del Cementerio, quien además hace 17 años trabaja entre las tumbas. "Yo, ya me cansé. Sé que el director y los trabajadores del cementerio hacen su mejor esfuerzo, pero actualmente estamos trabajando en malas condiciones", señaló Avendaño, quien tomó contacto con el diario la Estrella de Valparaíso para hacer efectiva su denuncia.

Basándose en el contrato colectivo firmado este año y que entró en vigencia el 28 de julio del mismo, Avendaño relata que en varios puntos, la Corporación Municipal, quien está a cargo de destinar los recursos a los cementerios, no ha cumplido.

"Se supone que el día 30 de septiembre debían entregar nueva indumentaria para los trabajadores del cementerio. Sin embargo hace más de dos años que llevo con la misma ropa. Mis pantalones están rotos, el sombrero todo sucio y la verdad es que estamos igual en invierno y en verano", señaló Avendaño, al diario La Estrella.

Según el contrato colectivo firmado por el Sindicato de Trabajadores del Cementerio y la Corporación Municipal, en forma anual, cada 30 de septiembre se deben renovar las vestimentas de los trabajadores, tanto de patio como administrativos y guardias.

Según el contrato, entre otras prendas de vestir, el 30 de septiembre se debían recibir tenidas de agua, parkas, bototos, buzos térmicos y camisas, entre otros objetos.

"No ha pasado nada", indica Avendaño, mientras muestra su pantalón roto y cocido a duras penas con un hilo verde para que no se le vea la piel.

En cuanto a la infraestructura de los cementerios, el trabajador, quien no fue apoyado por los dirigentes del sindicato en su denuncia, señala que están en pésimas condiciones.

"Los baños están asquerosos, llenos de hongos, los cual es peligroso para nuestra salud. Los techos están podridos y en invierno muchas veces nos debemos cambiar bajo las goteras", señaló Juan Avendaño, quien agregó que "me da pena ver esta situación. Para el día de Todos los Santos se arreglan los cementerios por fuera, pero nadie sabe lo que pasa por dentro. Yo llevo 17 años trabajando en los cementerios, pero la verdad es que esto ya ha sido mucho".

Avendaño agregó que "hice lo que tenía que hacer basándome en el contrato colectivo que se firmó. La Corporación no ha respondido en los puntos principales y por eso llegamos a este punto. Como dije antes, sé que muchos hacen esfuerzos para que el cementerio esté bien, pero también deben preocuparse de sus trabajadores. Lo mismo pasa con la comida para el almuerzo, la cual la traen en los mismos camiones que transportan cuerpos humanos; no creo que eso sea lo más optimo.".

En total son 91 los funcionarios que pertenecen a los cementerios 1, 2 y 3 de Valparaíso, quienes deben lidiar con las incomodidades de infraestructura y de vestuario que hasta el momento, según Avendaño, no han tenido solución.

A torno a lo anterior, el Sindicato de Trabajadores del Cementerio no quiso referirse al tema. J