Como cada primero de noviembre, Marcelo Salinas, se disponía a abrir su florería en el día más provechoso del año, pero lamentablemente se tuvo que enfrentar con una desagradable sorpresa, pues su local, "Jardín Primavera", fue víctima del actuar de antisociales.
Poco antes de las 09.00 horas de ayer llegó hasta su negocio, ubicado en la subida Cumming, y vio que como cada fin de semana, aún había jóvenes carreteados bebiendo en la vereda y además su local tenía evidentes daños; el travesaño del techo estaba en el suelo, la puerta del negocio contiguo estaba forzada y los candados con los que asegura la reja estaban llenos de fecas humanas, además de las botellas vasos y pozas de orinas que siempre se ve en el "amanecer del carrete".
Pese a que no se robaron nada, los desconocidos hicieron un gran daño a Marcelo, pues le impidieron trabajar con normalidad en el día más rentable para el negocio de la florería. "Hoy día pensamos que nos iba a ir bien, pero quien va a querer acercarse si está lleno de orina y excremento", comenta Marcelo mientras limpia su local con guantes de goma, paños, escobillones y botellas de cloro.
es tendencia
Marcelo indica que este hecho está lejos de ser un incidente aislado y los vestigios del carrete porteño, son una constante de los domingos en la mañana. "Como siempre, Valparaíso se ha hecho la ciudad de los curaos, acá se permite y se promueve el alcoholismo y el desorden", señala.