Insoluble en el corto plazo es el funcionamiento de la Unidad de Emergencia Adulto (UEA) del hospital Carlos Van Buren, que ayer sufrió un nuevo colapso en la atención.

Ahora el tema no pasa por falta de especialistas, sino por carencias en infraestructura. Ayer en la mañana La Estrella fue testigo del llamado que por altoparlante hizo el médico jefe del turno. "Contamos con 58 pacientes hospitalizados, no 18 como es la capacidad de la posta, es decir hay un superávit de 40 camas. De esos 58 pacientes internados hay 12 (ocho mujeres y cuatro varones) sin cama, es decir, un 20% de los pacientes está sin poder estar acostado". El galeno agregó que "el box de mujeres está completamente colapsado, por lo que se encuentra cerrado y con camillas ocupadas en el pasillo" y algo similar hubo en el de varones, que sólo tenía una camilla de atención. Mencionó que los pacientes con riesgo vital están en reanimación, y se dio prioridad a politraumatizados, víctimas de accidentes de transito, compromisos de conciencia, infartos al miocardio, convulsiones y paros cardiacos. Instó a las personas en sala de espera a ir a los Sapu. "En Playa Ancha no hay médicos", gritó una paciente que aguardaba ser llamada. "En este momento no hay falta de profesionales médicos sino que no hay donde atender. Los cirujanos también tienen una espera porque tienen cuatro cirugías e ingresaron al pabellón", finalizó la alocución del galeno. Varios optaron por emigrar del hospital.

La jefa de la UEA, doctora Valentina Duarte, admitió que lamentablemente el recinto se encuentra habitualmente saturado por la sobre demanda de pacientes hospitalizados. "Ayer a las 08.00 de la mañana teníamos 59 pacientes hospitalizados y de ellos 11 por acostar esperando camillas. Actualmente tenemos 62 hospitalizados y 7 por acostar. La situación es mas crítica aún", dijo en una balance a las 17.00 horas.

Confirmó que ayer no hubo falta de especialistas, y que el trabajo en la posta depende de la situación de camas tanto en el hospital como en la red asistencial. Añadió que la saturación provoca que la capacidad de respuesta para los pacientes ambulatorios, se vea retrasada por la limitación del espacio físico. La doctora Duarte es de la idea de mantener informada a la población de los tiempos de espera, y reforzar que pacientes C1 y C2 son prioridad. Los enfermos categorizados como C4 y C5 (por ejemplo afectados de resfríos o gripe común) acudan a los Sapu donde podrán ser vistos por un médico general. Además está el Saud en el mismo Van Buren que opera entre las 13.00 y 20.00 horas también con apoyo de un médico general. J