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Pascuero y su trineo se despedirán de El Retiro

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Es uno de los Pascueros más queridos y entusiastas de la zona. La tradición la trajo desde el Norte Chico y hace 11 años que los vecinos del sector de El Retiro de Quilpué, disfrutan con su solidaridad y entretenido paseo en trineo con renos y todo.

Héctor Araya Serey comenzó de a poquito cuando sus nietos estaban pequeños y se vestía de Viejito Pascuero. En ese mismo tiempo, su hermano mellizo le pidió que le entregara los regalos a sus hijos y así en el camino fue conociendo niños y entregando dulces. Ahí surgió la leyenda del pascuero de El Retiro, que con los años se fue transformando en un gran trineo hecho a medida y con luces nutridas por un generador.

Su último año

Debido a que el creador de esta tradición se cambió hace un mes de domicilio, al sector de la Villa Olímpica de Quilpué, Héctor Araya cree que es tiempo que otros tomen la posta y sigan con esta actividad en El Retiro.

"Me salió mi casa propia y me cambié de barrio, por eso yo creo que este es el último año en El Retiro. A la gente le da pena que sea así, pero es bastante cansador. Comencé hace casi dos meses generando el ambiente con villancicos en mi pequeño auto Lada y la gente me colabora con dulces y juguetes", señaló Araya, quien en sus primeras salidas se gastó su sueldo y el de su señora organizando la fiesta navideña.

Su trineo

Una de las características del Pascuero de Quilpué, es que su transporte es un trineo adaptado a una camioneta.

"Los renos y todo el trineo los hago yo mismo. Los corto en una pieza de maciza y les doy forma con espuma y plumavit. Mi trineo es completamente iluminado, para eso compré un generador. De ahí la espectacularidad del evento y por eso viene gente de Viña y Valparaíso a verlo", confiesa el entusiasta vecino, quien nunca intuyó la popularidad que alcanzaría su acción.

En la década que lleva haciendo al Pascuero, ha tenido varias anécdotas. Una de ellas fue la vivida el 2013, cuando comenzó a lloviznar bastante fuerte y comenzaron a destrozarse sus amigos renos por el agua. También hubo una ocasión en que le falló el generador eléctrico y debió hacer todo el paseo en penumbra o las primeras veces que no tenía dulces suficientes para todos los niños que se cruzaban en su camino.

A una semana de su primera salida navideña, el Pascuero de Quilpué está a toda prisa haciendo las bolsas de golosinas y clasificando los juguetes. Si desea ayudar, aún está a tiempo y no es necesario viajar al Polo Norte, sólo basta llamar al fono 62712565. J