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Socios e hinchas Caturros se tomaron la sede para exigir renovación de Ormeño

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No fue nada hecho al azar, la toma de la sede de Wanderers, por parte exclusiva de socios, fue una acción que se planificó hasta con grabadora "Go Pro" en mano. Es que ninguno de los 7 socios pretendió cometer delito alguno y a juicio de ellos, la toma es legal.

"Los nombres de todas las personas, con sus respectivos números de Rut y números de socios fueron entregados apenas llegó la policía, esto con el objetivo de que nos tildaran de delincuentes o desconocidos al club. Por eso la S.A. no nos ha sacado de la sede, pues la justicia entendió que esto es algo entre "socios" y mientras no existan daños, no pueden hacer nada", sostuvo Elías Figueroa, uno de los 7 ocupantes de la toma y quien hizo de vocero del movimiento y cuyo nombre es idéntico al del connotado ídolo nacional.

El propósito de esta acción, es exigir la renovación de contrato de Jorge Ormeño, quien declaró que desea seguir jugando exclusivamente en Wanderers. Es por eso que desde el interior de la sede advirtieron que no se moverán del lugar hasta lograr el objetivo, sea después de Navidad o incluso de Año Nuevo. Edmundo Inostroza, más conocido como "Mundial" y antiguo dirigente de la barra; también tomó la palabra y anunció que también piden la cabeza del director deportivo Juan Gutiérrez.

"Él (Gutiérrez) no representa el sentir wanderino y debe irse", indicó Inostroza.

el gerente

Roberto López, gerente general de Santiago Wanderers, quien junto a todos los funcionarios debió salir del inmueble, perdiendo de vender el "merchandising" o productos oficiales del club.

"Me parece insólito que se tomen la sede, que es de todos los socios, y le impidan a la gente ingresar a comprar sus regalos navideños y solicitar medidas a través de la fuerza. Además habíamos acordado una reunión para el jueves, si es que ellos hacían desalojo de manera voluntaria, por lo que es muy desagradable la situación", declaró López, quien insistió que no es la forma de hacer las cosas.

Desalojo

Hasta el cierre de esta edición se mantenía la toma, aunque personal motorizado habría llegado para advertir de un inminente desalojo de la sede de calle Independencia. J