Por el segundo piso

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Cámaras, alarmas, barrotes de seguridad en las ventanas. Todas las medidas de seguridad que han tenido a la mano han adoptado en la sastrería Rubinstein a fin de minimizar cualquier vulnerabilidad que pueda ofrecer el local. Sin embargo, nada ha sido suficiente para evitar que antisociales logren su cometido. En esta ocasión los sujetos - aparentemente dos hombres - habrían ingresado por una ventana del segundo piso a la que habrían podido acceder a través del techo de una vivienda vecina.