Berriel entrega su receta para sacarle trote al plantel caturro
Una vez a la semana se entrena en doble jornada y la mayoría trabaja su musculación.
Es respetuoso del trabajo de todos sus colegas, pero gracias a los triunfos ante Colo Colo y San Marcos de Arica, la labor de Ignacio Berriel, preparador físico de Wanderers ha salido a la luz por la entrega y despliegue del equipo hasta el minuto 90 y más.
"Nosotros, para cumplir el estilo de juego que propone Alfredo (Arias), debemos entrenar de determinada manera y al entrenar de esa forma, el desarrollo de la parte física puede ser mayor a otro método de entrenamiento, pero eso se irá viendo con el correr de las fechas", anuncia humildemente el profesional, quien lleva 6 temporadas como preparador físico en el cuerpo técnico que encabeza Alfredo Arias.
Sin querer comparar metodologías de trabajo con profesionales anteriores y tomando en cuenta la diversidad de edades existentes en un plantel; Ignacio Berriel explica que dentro de la semana hay un día que se trabaja en doble jornada. Dicha situación no ocurría antes, además de confesar que hay trabajo extra con la musculación y continúa la atención de nutricionista una vez a la semana.
La receta
Pese que el preparador físico manifestó que no existe receta, más que sólo el trabajo, para garantizar un buen fondo físico que se extienda toda la temporada; Berriel contó paso a paso su metodología.
"Postcompetencia se le da 24 horas de descanso, en casa, al jugador y posteriormente viene el trabajo regenerativo que se divide entre quienes fueron titulares y suplentes; equiparando las cargas entre ambos grupos. Ya en el tercer día de entrenamiento se suele hacer una práctica en doble turno. Acá en Chile no se utiliza mucho este doble horario, pero nosotros precisamos de plasmar una idea y necesitamos entrenar más para que se entienda. De repente ahí estamos cambiando la rutina que se tenía y quizás por ese lado se está ganando un trabajo que se está reflejando en los partidos", precisó el profesional uruguayo titulado del Instituto Superior de Educación Física de Montevideo.
"Los primeros días después del partido son de recuperación, pero después nosotros entrenamos fuerte hasta el día previo al partido y cada uno tiene sus escuelas o libros donde se guía para llevar un equipo adelante.Por ejemplo, en Arica, nosotros entrenamos en la mañana del mismo día y en la noche anterior cuando llegamos a la ciudad, también lo hicimos en la cancha alternativa. Por ahí quizás hay algunas diferencias con otros trabajos", detalla Berriel, quien está muy contento por la respuesta y disposición del grupo a su trabajo. Él centra el éxito de todo en el futbolista, siendo el mérito de los logros para los jugadores.
Tareas para la casa
Además de lo realizado en Mantagua, Ignacio Berriel comentó de algunas tareas específicas para determinados jugadores, que se han transformado en constante para casi todo el grupo.
"Otra cosa a destacar de este grupo, respecto a los futbolistas uruguayos que me ha tocado dirigir, es su profesionalismo. Comencé a repartir trabajo específico a algunos jugadores, post-entrenamiento o previo al entrenamiento y empecé con 6 ó 7 jugadores que necesitaban un trabajo complementario o extra, ya sea de musculación o aeróbico; y comenzaron a arrimarse otros jugadores ávidos de trabajar aparte post práctica. Este fue el caso de Andrés Robles, que al estar suspendido ha venido entrenando doble casi todos los días. O sea estaba esa necesidad de ponerse bien en la parte física, pues en el torneo anterior le había costado bastante", contó Berriel, quien explicó que su metodología no se replica en el área cadetes, pues son los juveniles que ascienden al plantel los que llegan a aprender el sistema de trabajo.