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Lo de Everton en Calama se presentaba como una nueva oportunidad para vencer y rehabilitarse, tras un paupérrimo arranque en la segunda rueda. Pero ante los errores y yerros infantiles que sigue cometiendo el cuadro viñamarino -y que fueron bien aprovechados por Cobreloa, que se impuso por 2 a 1 el sábado- no hay planteamiento, ni estrategia que resista.

Es que más allá de las bajas por lesión con que llegaron los ruleteros al Zorros del Desierto, los errores -que según el técnico Rivero, son puntuales- se siguen repitiendo, sin corrección aparente. Y es cosa de ver los goles para ver porqué del bajón viñamarino. En el 1-0 de Cobreloa nadie marcó al diminuto volante José Barrera, quien, sin mucho esfuerzo, cabeceó en el área cambiándole el palo al arquero. Y en el 2-0, el "Halcón" González que vuelve a fallar en la salida (no se entendió con Suárez) y el meta que regala el segundo tanto, tal como lo hizo en Temuco con el gol clave de Comba.

Y para colmo de males, un experimentado como Alejandro Carrasco -que acaba de ingresar y tenía tres minutos en cancha- golpea a un rival y se gana la roja.

Para colmo de males, el líder Temuco volvió a los triunfos y con ello ya le saca 14 puntos de ventaja a un Everton al que de seguir así... sólo le quedará la final de fin de campeonato ante el ganador de la segunda liguilla del año.

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