D. Tossi/N. Valverde. - La Estrella de Valparaíso.

Definitivamente Neptuno no quiere nada con los bañistas y nuevamente mandó a la fragata portuguesa, que obligó a la Seremi de Salud a tomar la medida de cerrar dos nuevos balnearios. Esta vez las playas afectadas son Las Torpederas de Valparaíso y Las Salinas en Viña del Mar.

Ayer en la mañana, y como todos los días de verano, decenas de personas llegaron temprano a Las Torpederas. La mayoría provenían de Santiago, y no estaban informados de la prohibición de ingresar al mar, ya que no vieron la bandera amarilla y confiaron en que no había problema alguno.

Es el caso de Adriana Martínez, quien arrancó del intenso calor santiaguino junto con su familia. Según cuentan, ellos estaban al tanto de que las playas de Cartagena se encontraban cerradas, por lo que decidieron venir a Valparaíso, pero la sorpresa fue mayor cuando se encontraron con la misma situación.

"Lo encuentro súper mal porque como nosotros venimos llegando hoy y no sabíamos. Por lo menos debería haber un cartel que avise, ya que una como mamá tiene que cuidar a los niños y tenemos que saber que no se pueden bañar", señaló.

Mauricio Castro administra hace cuatro años el popular balneario porteño. Y asegura que "nos ha tocado una temporada difícil, no solamente por la fragata portuguesa sino porque el mal tiempo tampoco nos acompaña", opinó el trabajador, que se mostró preocupado principalmente por la seguridad de los niños.

"Los salvavidas cumplen con la función de avisar y prevenir. Pero la gente no hace caso", comentó.

El administrador de Las Torpederas estaba igual de confundido que los veraneantes. Debido que no fue informado tempranamente del cierre de la playa, por lo que no contaba con la bandera correspondiente a este tipo de emergencias.

Cabe recordar que el cierre de las playas no significa la prohibición del ingreso a los balnearios, sino que solamente prohibe bañarse y realizar actividades en el mar.

Las salinas

El mismo panorama se vivió en el balneario viñamarino Las Salinas. Desde temprano los bañistas comenzaron a llegar con sus quitasoles y trajes de baño, pero cuando se disponían a refrescarse en el agua "¡piiiiiii!", el pito del salvavidas les mataba la pasión.

Y con las caritas largas volvían a sentarse debajo de sus sombrillas veraniegas. No queda más que disfrutar de la arenita y el sol.

Eso le paso al papá de la familia Arenas de Santiago. Muy contento se quiso lucir ante sus mujeres que lo miraban atentas desde sus toallas, y apenas puso una patita en el agua el salvavidas lo piteó. Por lo que recibió las risas de sus espectadoras.

El guardián de la bahía que la lleva en Las Salinas es Giovanni Damiano, quien dijo que sólo sacaron unas diez medusas del mar. Una cifra baja en comparación a otros balnearios como Reñaca.