Cinthia Matus O.
Una rotura de matriz ubicada en el sector oriente de la Población Vergara de Viña del Mar, dejó las calles 5 y 7 Norte (entre 5 Oriente y Los Castaños) totalmente inundadas. La situación, que fue advertida por los propios residentes a eso de las 08.00 horas, provocó que el suministro fuera suspendido durante gran parte del día y que varios transeúntes se mojaran los pies como si estuvieran en pleno invierno. Así también, que los conductores se arriesgaran realizando maniobras que por su propia imprudencia, pudieron terminar en graves accidentes.
A eso de las 10.00 de la mañana, el agua todavía corría sin cesar por estas céntricas avenidas. Tanto así, que algunas personas tuvieron que dar la vuelta por otras calles para evitar mojarse. Una de las que se arriesgó fue Natalia Rivera que bien pintosa, decidió cruzar desde 5 Norte a 5 Oriente pasando por las pozas. "Ya voy media atrasada. Si me doy la vuelta por la calle de más arriba, me voy a demorar más y prefiero mojarme un poco y después en la micro secarme", comentó riendo.
Luego, cuando el semáforo dio verde, la mujer cruzó y aunque trató de dar un salto largo, no le resultó y sus chalas negras de terraplén quedaron totalmente empapadas. "¡Me siento más fresquita!", bromeó tomándoselo con humor.
"no es gracioso"
Quienes no estaban muy contentos con el problema eran don Gustavo y su compañero Renato, que con sus uniformes de obreros, tampoco querían darse la vuelta por las calles secas para cruzar. "No puede ser posible que en estas calles tan transitadas tengamos que estar esquivando el agua como si estuviéramos en invierno. Eso es porque el material está fatigado y la empresa no quiere gastar dinero para repararlo. Lamentamos que así sea porque ahora todos los vecinos y los dueños de los locales se quedaron sin agua potable. Eso no es gracioso", reclamaron.
Acto seguido, esperaron que pasara una micro para cruzar hacia 5 Oriente. Al igual que Natalia, ambos hombres intentaron dar un salto largo, pero no les resultó y el agua les salpicó en los pantalones.
Un par de jóvenes que atravesaron la calle 5 Norte, entre 5 y 6 Oriente, se reían de las piruetas que tuvieron que hacer para esquivar el agua. "Bueno, al menos está haciendo harto calor y las tillas (zapatillas) se me van a secar altiro", dijo uno. "Sí, demás, pero me carga andar con los pies mojados", reclamó otro.
Los vecinos de la matriz tampoco estaban muy contentos con el corte del suministro, pero se armaron de paciencia. "Nos dijeron que la iban a cortar para hacer las reparaciones y vamos a tener que esperar no más. Lo que más lamento es la pérdida de agua sabiendo que hay sequía en tantas partes. Me da pena cómo se pierde esa agua limpia", opinó Mireya Cifuentes.
El servicio, de acuerdo a lo informado por Esval, empresa responsable de la matriz, se repuso a las 16.00 horas.