Claudia Carvajal

Para realizar los poco más de diez minutos que dura "Historia de un oso" sus realizadores se tomaron cerca de cinco años en desarrollarla. Fue un trabajo realizado artesanalmente, pero con mucha dedicación y profesionalismo y donde tuvieron un rol muy importante los integrantes de la banda sanfelipeña Dënver, Milton Mahan y Marina Montenegro, quienes crearon la hermosa música incidental.

"De alguna manera esperábamos que sucediera esto, pero por la manera en que se trabajó el corto...fue una sorpresa. Es muy bonito todo lo que ha pasado", reconoció ayer Milton Mahan, quien seguía emocionado por el Oscar al Mejor Cortometraje animado recibido por el director Gabriel Osorio y producido por Patricio Scala, ambos del estudio de animación Punk Robot.

Mahan recuerda cómo fue el trabajo detrás de "Historia de un oso": "El proceso completo partió el 2009 y terminó a fines del 2013. El trabajo fue realizado de manera muy artesanal nosotros entre medio de giras, de hacer nuestros discos".

Cuando los Dënver estaban trabajando en otro proyecto de animación de Punk Robot, Gabriel Osorio se les acercó y les contó vagamente sobre la historia que tenía basada en esta familia de osos. "Era una idea súper descaballeda, hacer un cortometraje animado y nos decía cómo quería que se viera y era alucinante poder hacer algo así en Chile. De a poco nos empezó a mandar material y nosotros comenzamos a crear las melodías".

Una protagonista más

La participación de Milton y Mariana no fue al final, cuando estaba todo hecho. Primero se familiarizaron con la idea de Osorio, luego vieron los story board (guión gráfico), las figuras de los osos hechas en plasticina. "Agarrándonos de todo eso empezamos a proponerle las primeras músicas a Gabriel, después ellos iban montando partes ya animadas, otras sólo con dibujos de referencia e íbamos viendo si funcionaba, si daba con el tono del corto".

Al tratarse de una película muda, la música pasa a tener un rol muy importante. Milton Mahan recuerda: "Cuando nos juntábamos los referentes de ellos eran grandes producciones y nosotros teníamos recursos limitados. Pero como todo pasa adentro de un organillo, nos imaginamos algo sencillo, con la sonoridad de una cajita musical. Queríamos que fuera bien honesto, hecho a pulso. Se siente una cosa pequeñita, bien íntima en la música".

Los instrumentos usados fueron piano, metalófono y el chelo interpretado por Felicia Morales.

Los autores de "Historia de un oso" visitarán hoy La Moneda y se reunirán con la presidenta Michelle Bachelet quien en visita a La Ligua ayer manifestó: "Parece que en Chile estamos siendo capaces de cumplir los sueños. Primero ganamos la Copa América, después la gratuidad en educación superior y ahora un Oscar. Vamos por buen camino".

por Álvaro Inostroza Bidart

La diversidad sexual se ha transformado en un tema recurrente en el cine de autor, tanto en Estados Unidos como en Europa; lo que se asocia con la preocupación de los cineastas de este tipo, por colocar tópicos sobre la mesa, que habitualmente no están en la discusión de los medios masivos. Es el caso de la cinta "Carol" (2015), dirigida por el cineasta estadounidense Todd Haynes, basada en la novela homónima de la gran escritora norteamericana contemporánea Patricia Highsmith; ambientada en los años '50 y que narra la tendencia lésbica de su protagonista, Carol (una destacada Cate Blanchett), a pesar de los intentos de su familia, sociales y de ella misma, por superar esta "enfermedad".

Haynes, de 55 años, es considerado un cineasta rebelde dentro de la cinematografía estadounidense, de lo que da cuenta su interesante filmografía. En 1991 dirigió su primer largometraje, "Poison", basado en textos del escritor francés Jean Genet. Luego, vinieron "Safe" (1995), sobre la vida en los suburbios del país del norte; "Velvet Goldmine" (1998), con personajes protagónicos basados en David Bowie e Iggy Pop; "Lejos del Cielo" (2002), sobre el cinismo de la sociedad estadounidense; y "No Estoy Aquí" (2007), basada en la vida de Bob Dylan; lo que manifiesta su interés por hacer un cine sobre temas relacionados con el arte y la sociedad, desde una perspectiva contemporánea. En "Carol", aparte de adaptar una novela importante de su país, Haynes nuevamente coloca en el tapete la hipocresía de la sociedad estadounidense, ya que la protagonista al parecer tiene un matrimonio relativamente normal con Harge (Kyle Chandler), con una hija pequeña que adora. Al poco andar, el espectador se entera de que se está separando de su esposo, a pesar de la excelente situación económica y social de éste. La situación se agrava cuando Carol se interesa en Therese (Rooney Mara), una joven y atractiva dependiente en una gran tienda por departamentos, la cual también se siente atraída por la elegancia y misterio de esta gran dama. El gran mérito de la cinta es la sutileza con que se trata este tema. Hay muchas cosas que se sugieren más que mostrarse, salvo la escena en que finalmente hacen el amor Carol y Therese; en que de todos modos la cámara logra imágenes de gran belleza, dando cuenta acertadamente de esta historia de amor, en la cual la protagonista está siempre rodeada de un halo mágico.