Minutos de espanto vivió una profesional de la salud que fue asaltada por una banda delictual en su hogar del cerro Los Placeres.

Cerca de la medianoche de ayer la matrona L.F.A.R., de 28 años, se encontraba sola en su casa de avenida Los Placeres, cuando sintió ruidos provenientes del antejardín.

Abrió la puerta del acceso principal para mirar el origen del disturbio, cuando se encontró de frente con tres desconocidos de contextura delgada y rostro cubierto, los que previamente ingresaron al inmueble escalando el muro perimetral.

Los hampones intimidaron a la víctima con armas blancas y destornilladores, y la obligaron a que entrara nuevamente a la residencia. Mientras uno la mantenía amenazada para que no solicitara auxilio a los vecinos, los otros recorrieron las dependencias en búsqueda de dinero y especies de valor.

Finalmente se apropiaron de 500 mil pesos en efectivo y diversas joyas de oro avaluadas en unos tres millones de pesos.

Los antisociales se retiraron sin provocar lesiones a la matrona, que alertó de los sucedido a Carabineros de la Tercera Comisaría Norte, los que acudieron al sitio del suceso y efectuaron patrullajes sin resultados positivos. Los uniformados comunicaron el ilícito al fiscal de turno, Osvaldo Ossandón, que sólo dispuso se diera cuenta del hecho al tribunal por el delito de robo con intimidación.

Este atraco se suma a otros similares ocurridos en otros cerros de la ciudad patrimonial.

Dos hombres de 18 y 31 años, fueron detenidos en la Av. Valparaíso por personal de la Sección de Investigación Policial de la Primera Comisaría de Viña del Mar, tras ser sorprendido ocultando unos bolsos matuteros al interior de un basurero. Ambos fueron fiscalizados y encontraron diversas especies robadas para su posterior comercialización. Como gel de rasurar, detergente, mayonesas, desodorantes en barra, pilas y baterías, shampoo y acondicionadores de distintas marcas; latas de mariscos en conservas. Todo perteneciente a los supermercados Santa Isabel y Líder de Av. Valparaíso. El fiscal de turno ordenó su detención y respectivo control de detención por el delito de receptación.

Fabián San Martín D.

"A la primera agresión hay que decir basta, porque esto va in crescendo. Pensé que nunca me iba a pasar. Ahora estoy viva de milagro", fueron las conmovedoras palabras de A.G., víctima de un frustrado femicidio ocurrido a fines de enero en Valparaíso.

En esa fecha la joven capitalina, madre de cuatro hijos, vino a Laguna Verde junto a su pareja a disfrutar unos días de asueto. Acamparon en playa Las Docas y en horas de la noche ocurrió el violento ataque. Tras una discusión ella salió de la carpa a tomar aire y relajarse. Cuando regresó la esperaba con un cuchillo en la mano, con el que la hirió en el pecho, hombro y espalda. La hoja se quebró y quedó incrustada a escasos centímetros de su columna. La llevaron al Van Buren donde le salvaron la vida. No era primera vez que la agredía, porque en dos años de relación quebró su nariz y la apuñaló en un brazo. Habían tres denuncias de violencia intrafamiliar. "No lo dejé antes por miedo, costumbre y debilidad. Ahora tengo miedo que salga libre. Hago esto (querella) para estar tranquila junto con mis hijos. Ojalá le den el máximo castigo posible, mínimo unos 10 años de cárcel", enfatizó la afectada que está en tratamiento médico -tiene problemas de movilidad en un brazo- y sicológico. El agresor se encuentra en prisión preventiva. Ayer el Servicio Nacional de la Mujer, a través de la directora regional, Waleska Castillo, y la abogada Pamela Campos, presentó en el tribunal de garantía una querella por femicidio frustrado. "Estamos representando y apoyando a la víctima, y trabajando en el tema de la prevención. No hay ninguna justificación para violentar o agredir a una mujer", dijo Waleska Castillo, que instó a las víctimas a utilizar la red gubernamental para denunciar estos delitos.

10 femicidios frustrados hubo en la región en 2015. El año pasado 5 mujeres fueron asesinadas por sus parejas.