Fabián San Martín D.

De un certero disparo en el pecho fue asesinado un hombre en Villa Alemana. En rápidas diligencias la PDI pudo esclarecer el delito y arrestar al responsable.

Cerca de las 22.50 horas del miércoles J.L.G. regresaba a su hogar por la calle Lima, cuando en la esquina de Condell vio un bulto a un costado de una pandereta. Al borde de un estero estaba tendido decúbito dorsal un varón. El Samu constató el fallecimiento y a Carabineros de la Sexta Comisaría le pareció extraño que tenía una lesión en el rostro (pómulo y mentón derecho), atribuible a la acción de terceros. Se dio cuenta a la fiscal de turno, María Alejandra Aravena, que dispuso la concurrencia de la Brigada de Homicidios de Valparaíso.

En compañía de peritos de Lacrim, los detectives examinaron al occiso, que no portaba identificación. El sujeto de 1.70 de altura, contextura delgada, vestía chaqueta, jeans y zapatillas. Al revisarlo, los policías ratificaron que falleció por acción de terceros, pero no a causa de golpes, sino que de un certero disparo en la región torácica anterior, en la zona precordial. Al momento de la revisión se estimó una data de muerte cercana a las cinco horas. No fue posible ubicar a testigos del hecho, pero gracias a peritajes y rápidas diligencias de un equipo de la BH, a cargo del comisario Claudio Alarcón, se identificó al fallecido y se ubicó al imputado del crimen.

Con antecedentes

El occiso fue individualizado como Andrés Custodio Contreras Araya, de 32 años, domiciliado en la población Prat de Villa Alemana, con antecedentes por robo en lugar no habitado, robo por sorpresa y porte de arma cortante. La BH estableció que el occiso ingresó con la intención de robar una casa del sector, y en el interior se topó con el jefe de hogar, de 62 años, que estaba junto a otra persona.

El antisocial portaba un cuchillo y el jubilado al verse amenazado le disparó. El intruso huyó, pero cayó muerto a metros del domicilio. Fue recuperada el arma de fuego, para la que aparentemente el imputado no tenía permiso de uso. Hoy el imputado comparecía al tribunal de garantía local, donde los intervinientes discutirán si actuó o no en legítima defensa.

Tras una investigación de cuatro meses, la Brigada Antinarcóticos de Valparaíso arrestó a dos chilenos y una boliviana implicados en tráfico de drogas. El subjefe de la unidad, comisario Héctor Guenante, dijo que las pesquisas determinaron que en Porvenir Bajo habría una entrega de droga. Hasta una casa llegó la boliviana D.S.P., de 55 años. En una caja de zapato trajo desde Santiago 6 kilos 400 gramos (19 mil dosis) de pasta base de cocaína, avaluada en unos 22 millones de pesos. La entregó a los porteños G.P.P., de 42 años, y S.A.V.C., de 49, que tras aumentar el volumen la venderían entre microtraficantes de Valparaíso y Quillota. Para evitar 'mexicanas' tenían una arma a fogueo adaptada con munición real, pistolas a fogueo y un electroshock. Los chilenos -con amplio prontuario- y la extranjera fueron remitidos al tribunal de garantía de Quillota, para ser formalizados por infracción a las leyes de drogas y armas.

A un hombre en situación de calle que llevaba meses desaparecido, correspondería el cadáver que fue encontrado en una casa de cerro Los Placeres.

El suceso ocurrió en un domicilio de calle Bartolomé Vivar. En horas de la tarde llegó al inmueble C.F.A., de 48 años, quien lleva varios meses buscando a su hermano A.F.A., el que se encontraba en situación de calle, y que por los datos que ella manejaba podría estar residiendo en esa propiedad abandonada. La mujer abrió una de las ventanas, y al mirar al interior descubrió la presencia de un cráneo humano. Alertó a personal de Carabineros de la Tercera Comisaría Norte, que verificó se trataba de un cadáver. Se dio cuenta a la fiscal de turno, Mónica Arancibia, quien dispuso la concurrencia de la Brigada de Homicidios. La jueza de garantía Cristina Cabello autorizó el ingreso de los peritos para la revisión del sitio del suceso y recolección de evidencias. Los detectives hallaron un cuerpo entero esquelético, pero el tórax y el abdomen tenían tejidos blandos. Además habían osamentas como una vértebra cervical y mandíbula. El cadáver presentaba la acción de fauna y se encuentra irreconocible, y la causa primaria de muerte fue caratulada de "indeterminada".

Habría una data estimada superior a los tres meses, que coincide con la desaparición de A.F.A. No obstante se necesitan exámenes de ADN con familiares y otras pericias en el Servicio Médico Legal para determinar la identidad y causa exacta del fallecimiento.