David Pizarro
Soy de los históricos amantes de Valparaíso y, por ende, de mi querido equipo Santiago Wanderers. Por ello es que me cuesta creer lo que ha sucedido con David Pizarro. Gran jugador, gran ejemplo de vida y gran persona. Sin embargo, desde que regresó a jugar por la ciudad fue otro. Se dedicó más a hablar de todo menos de jugar y más encima tuvo problemas físicos. Algunos medios trataron de ponerlo hasta en opiniones políticas y, lamentablemente, ahora vemos resultados nefastos para todos, porque no creo que David esté feliz saliendo de esta manera de su amada ciudad. Solo espero que junto a su familia pueda salir adelante y que como es un hijo de Dios, espero que tenga buenas vibras y quienes no le han hecho bien con consejos u orientaciones que se alejan de la cancha se distancien de él de la mejor manera.
Miguel Tolosa.