Priscilla Barrera Ll.

Yo soy ciega, sorda y muda mijita...no vi ni escuché nada". Así responde a nuestra consulta una comerciante que pide no ser identificada con ninguna seña que permita saber quién es. Pocos metros del lugar donde la noche de este martes, un hombre de 31 años fue baleado por otro que descendió de un vehículo que está siendo buscado por la policía, una mujer joven nos aconseja: "Sabe, mejor no pregunte nada y váyase".

Es el ambiente que se vive en la Población Puerto Aysén de Forestal, donde en horas de la madrugada y pese a los esfuerzos del personal médico del Sapu Las Torres, Jesús Jiménez Olmedo de 31 años, falleció a raíz de la herida a bala que recibió en el abdomen.

El hombre, con antecedentes por lesiones graves, fue atacado cuando salía desde una botillería en compañía de una mujer.

Así lo confirmó el jefe de la Brigada de Homicidios de la PDI, subprefecto José Araneda, quien precisó que se encuentran realizando diligencias para identificar el automóvil en el que se movilizaba el atacante.

"La víctima, en horas de la noche del día de ayer,(martes) en la calle Rogelio Astudillo con Río Aysén en Forestal Alto, estaba en compañía de una mujer, ingresa a una botillería, y al salir de ésta es interceptado por un sujeto que desciende de un vehículo y quien le propina un disparo y luego huye del lugar", detalló el jefe policial.

Araneda añadió que se trabaja en la identificación del vehículo que participa y si en éste iba más de un sujeto. "Luego veremos cuál sería el móvil, por lo pronto no se ha establecido aún a qué se debió este hecho", precisó.

En tanto en la población Puerto Aysén, la botillería de donde salía la víctima permanecía ayer cerrada y los vecinos se excusaban de referirse a este hecho.

Llevaba un año trabajando puertas adentro en un domicilio de la calle Los Pinos en Miraflores Bajo y tras ganarse la confianza de sus patrones, la asesora del hogar M.C.O.V. de 43 años tentó su suerte y comenzó poco a poco a llevarse joyas y dinero en efectivo de los dueños de casa. Como no había despertado sospechas, continuó con su "robo hormiga" hasta que esta semana su patrona, una agricultora de 83 años de la zona, se percató que desde un sitio que sólo ella y sus cercanos conocían habían desaparecido algunas de sus joyas.

Las dudas recayeron de inmediato en la trabajadora, quien frente a la evidencia y ante los efectivos de la Policía de Investigaciones, no tuvo más que admitir que desde hacía meses venía robando las joyas de su jefa - la mayoría de las cuales había empeñado -y dinero en efectivo, todo avaluado en cerca de 6 millones y medio de pesos.

Así lo informó el comisario de la unidad de investigaciones de la PDI de Viña del Mar, comisario Omar Salazar Romero, quien valoró el hecho de que lograran recuperarse algunas de las especies sustraídas y recomendó siempre chequear antecedentes de las personas que realizan este tipo de labores.

"Se logró recuperar dos anilos y un par de aros avaluados en 2 millones de pesos", precisó Salazar.

La mujer pasó a control de detención en el Juzgado de Garantía de Viña del Mar.