Secciones

Presidio perpetuo

E-mail Compartir

El fiscal de Quintero, Mauricio Dünner confirmó que los hechos se originaron en una discusión previa y que terminó en una especie de emboscada que le efectuaron a las dos víctimas fatales. El persecutor manifestó que dada la gravedad del delito, el imputado - que permanecerá en prisión preventiva durante los 90 días que se fijaron como plazo de investigación - arriesga incluso una pena de presidio perpetuo. El defensor penal público en tanto, Fernando Pinto, se manifestó cauto precisando que su representado aún no ha prestado declaración en torno a lo ocurrido y que la investigación recién ha comenzado. "Tenemos que verificar ciertos antecedentes que esperamos y aspiramos permitan acreditar que la situación no es en la forma en que ha relatado el señor fiscal", puntualizó el defensor.

En prisión quedó imputado por doble asesinato en Quintero

Gastón Alejandro Salinas Olivares fue formalizado por homicidio calificado y homicidio simple. Arriesga incluso cadena perpetua. Joven mantiene causa por porte ilegal de arma.
E-mail Compartir

Priscilla Barrera Ll.

Una pendencia que tuvo como ingredientes insultos y amenazas varias, e incluso de muerte, antecedieron el doble homicidio que conmocionó a Quintero este fin de semana y que involucraron al autor material del crimen y al hermano de una de las víctimas fatales.

Así se conoció ayer, pasadas las 13 horas, en el Tribunal de Garantía de Quintero durante la audiencia en que fue formalizado por el homicidio calificado de Francisco Gonzalo Veas Gómez de 21 años y el homicidio simple de Wilson Eduardo Pastén Ampay de 19, Gastón Alejandro Salinas Olivares de 18 años, autor material del crimen ocurrido en plena vía pública, en la intersección de la calle Tres con Diego Portales.

El fiscal Mauricio Dünner detalló al comunicar los antecedentes de la formalización que el sábado 24, cerca de las 18 horas, una media hora antes del doble homicidio, el imputado interceptó a los hermanos Francisco Gonzalo y Manuel Adrián Veas Gómez cuando éstos transitaban a bordo del automóvil Toyota Yaris de propiedad del primero.

Según el fiscal y sin que existiera conocimiento entre los hermanos y el imputado, este último profirió insultos en contra de Manuel Veas, amenazándolo de muerte e incluso de agredir sexualmente a su madre.

A raíz de esta situación, Manuel Veas agredió con golpes de puño a Gastón Salinas, provocándole sangramiento nasal.

Media hora más tarde y cuando el hermano de Manuel, Francisco, transitaba en su auto junto a sus amigos Wilson Pastén y Robert Eastman, fueron interceptados en calle Tres con Diego Portales por el imputado, que se movilizaba en el asiento del copiloto y aparentemente con otros 3 ocupantes - entre ellos dos mujeres - en un Citröen modelo C4. Se inicia nuevamente una discusión, Francisco desciende de su auto y le dice a Gastón que arreglen el tema "a manos limpias", lo que claramente no fue acogido por su victimario, quien tras haber disparado contra el capeau del auto, a sangre fría le disparó al menos en tres oportunidades, hiriéndolo mortalmente en el tórax.

No conforme con esto, el joven imputado, que durante toda la audiencia mantuvo su cabeza gacha, disparó en contra del copiloto, Wilson Pastén.

Se salvó

En medio de la balacera y sin poder hacer más, Robert Eastman, el tercer ocupante del automóvil en que se movilizaban las víctimas, logró escabullirse, poniéndose a resguardo tras un muro y logrando identificar al agresor, a quien sindicó por su apodo de "el Gastón Chico", señal que permitió a efectivos de la SIP de Carabineros de Quintero ubicar su paradero y concretar su detención, previa autorización del tribunal quinterano, 24 horas más tarde de ocurrido el crimen que conmocionó a Quintero.

"Hubo un incidente en el cual el imputado habría efectuado aproximadamente 9 disparos sobre las víctimas, tras lo cual resultaron dos personas fallecidas. Una tercera persona que iba acompañando a las víctimas habría resultado fundamental para dar los indicios y características sindicando al actual imputado respecto de su identificación", precisó el jefe de la Cuarta Comisaría de Concón, mayor Freddy Vergara.

Mientras en el tribunal el imputado de este doble crimen era formalizado, familiares y amigos de (Francisco) Gonzalo y Wilson velaban sus restos en sus respectivos domicilios.

"Las dos familias están muy mal. Nosotros esperamos que caiga todo el peso de la ley sobre ellos, eso no nos va a devolver a los niños, pero que se haga justicia, porque este niño no es primera vez que lo hace y siempre ha quedado impune, nosotros no vamos a descansar hasta que él no pague", manifestó entre lágrimas Teresa Gómez, tía de Francisco Gonzalo quien descartó de manera tajante que el crimen haya sido por un ajuste de cuentas.