Secciones

Porteños se quejan por violencia y desenfreno

Vecino fue agredido por defender su casa. Mientras, miles de visitantes al Carnaval Mil Tambores utilizaron plazas y espacios públicos para dormir.
E-mail Compartir

Nicole Valverde S.

Los vecinos y vecinas de calle Cumming ya no quieren más guerra. Todos los fines de semana luchan contra el escándalo que se arma con los carretes callejeros en la plaza El Descanso. Dicen estar aburridos de que los frontis de sus viviendas sean utilizados como baños públicos y lidiar con la orina, fecas humanas, botellas reventadas y basura.

Se han organizado para mantener la armonía en su barrio, pero todos sus esfuerzos se vieron sobrepasados este fin de semana, en el marco del Carnaval Mil Tambores. Según cuentan, el sábado pudieron dormir un poco más tranquilos, pero la jornada del viernes fue incluso más escandalosa que en el Año Nuevo.

Fue del terror

Jacqueline Leyton y su hija Ivana Arellano se levantaron temprano ayer para limpiar la vereda del frontis de su vivienda y la confitería con que se sustenta la familia.

Con baldes llenos de agua y detergente escurren la orina y fecas que los visitantes dejaron durante la noche anterior. Según ellas "al menos fue un poco más tranquila", ya que la presencia de un alto contingente policial de Carabineros evitó que se repitiera lo mismo del viernes -cuando se concentraron al menos unas 300 personas- y un vecino fue agredido y golpeado con un adoquín en su cabeza por evitar que rayaran su casa que estaba recién pintada.

"Fue del terror... ¡horrible! Acá nosotras vivimos con niños y hay dos guaguas, todos estaban llorando porque sintieron miedo de la bulla y el escándalo que tenían en la plaza éstas personas. Eran puros borrachos súper agresivos que se amenazaban unos a otros. Carabineros nunca apareció el viernes a diferencia de ayer (sábado), que estuvieron toda la noche y al menos no pasó nada", cuenta Jacqueline.

"Deberían suspenderlo", dice tajante Ivana. "Porque no puede ser que vengan de otros lados a agredirnos a nuestras propias casas y barrios. Cuando nosotras escuchamos que estaban golpeando al vecino, salimos y nos pusimos a gritar para que no le siguieran pegando. También se metieron a defenderlo otros vecinos que se salvaron por poco".

Camping en la calle

Mientras, como las playas fueron cerradas desde temprano por la Gobernación Marítima, medida que sirvió bastante para que no se llenaran de basura como en años anteriores, muchos visitantes improvisaron camping en las plazas: Victoria, Av. Brasil y sectores aledaños a la playa Las Torpederas sirvieron a estos fines.

Pero ayer muy temprano por la mañana fueron despertados por Carabineros para que desarmaran sus carpas. Otros, simplemente durmieron donde pudieron, a la intemperie o donde los pilló el sueño.