Francisco Pietrantoni R. - La Estrella de Valparaíso
Catalina Vargas Candia tiene 25 años recién cumplidos, estudia Derecho en la Universidad Andrés Bello, le gusta pintar y el modelaje, se considera una mujer organizada y siempre está haciendo algo porque le encanta estar en movimiento y disfrutar la vida. De hecho en estos últimos meses se divide entre causas en Tribunales de Justicia y clases de maquillaje, modelaje y protocolo. Catalina nació en Santiago y vivió hasta los 15 años momento en que su familia se trasladó a Valparaíso, por diversos motivos regresaron a la capital y ella se quedó y actualmente vive en el sector de Gran Bretaña en Playa Ancha con su pololo.
"No regresaría a Santiago, aquí encontré todo lo que necesito para ser feliz, esta ciudad es hermosa, inclusiva y diversa, antes era una cabra chica con muchos prejuicios y súper cerrada de mente, Valparaíso me cambió la vida y me hizo entender que la vida no es sólo blanco y negro. Estoy súper feliz de estar aquí y de formar parte de este concurso, que por lo demás me encantó porque no es algo frío y busca una representante integral. Me encanta conocer distintas realidades y todas las que concursamos tenemos historias súper diferentes y ha sido agradable conocer y compartir nuestras experiencias", expresó la futura abogada.
Si bien es cierto se lleva bien con sus padres, no ha sentido el apoyo en lo que respecta a concursos de belleza, ya que Catalina ya ha estado en otras instancias, pero sus padres lo miran con distancia, porque para ellos lo fundamental es que la Cata se convierta en abogada. Ante esto, la joven tiene una postura diferente, "no creo que tenga que hacer sólo una cosa para ser feliz, yo puedo complementar mi vida con distintas actividades y así ha sido hasta ahora, en general la gente es súper crítica cuando te ven en tantas cosas, pero he aprendido a canalizar las buenas y malas energías, simplemente me interesa ser feliz".
Catalina está preparándose con todo para ganar el concurso y representar a Valparaíso, ya que de alguna forma quiere devolver la mano a la ciudad que le hizo cambiar su forma de ver la vida y cree que con el apoyo de los playanchinos logrará convertirse en Reina de los Cerros.