Erika Rojas Salazar
Más de 10 mil boletos vendidos y con la certeza de que se venderá todo para mañana, el Clásico Porteño agota sus últimas baterías antes del pitazo inicial del juez Roberto Tobar.
Wanderers practicó ayer en Mantagua a puertas abiertas y el técnico Eduardo Espinel sólo esperará a Adrián Cuadra, para confirmar los once escogidos para mañana. Pasa que el seleccionado Sub-20 retornó el miércoles desde Santiago y éste trabajó con cargas diferenciadas, por lo que se le esperará hasta hoy.
"Tanto Oscar Opazo como Adrián Cuadra están representando a la Selección. Lo de Adrián Cuadra con la Sub-20 es repetitivo. Él llegó en buenas condiciones, pero lo vamos a esperar hasta mañana (hoy), para ver cómo reacciona. Siempre espero 48 horas para un esfuerzo mayor, pero sería de la partida si está en condiciones", adelantó Espinel. De esta forma, la más segura formación será con Gabriel Castellón en la portería; Opazo, Mario López, Mario Parra y Federico Pérez en defensa; Luis García, Adrián Cuadra, Rubén Farfán, David Terans y Matías Fernández en mediocampo; dejando a Javier Parraguez como delantero.
QUe llegue la hora
Tras 21 días sin partidos oficiales, en Wanderers sólo quieren jugar para poder seguir en la buena senda, teniendo en claro el significado del clásico con Everton.
"Estos partidos tienen un condimento muy lindo y estamos muy tranquilos porque se está trabajando muy bien. Se ha hecho un buen trabajo en el campeonato y no tenemos nada de qué reprocharnos. Por eso estamos seguros que el partido con Everton hay que disfrutarlo porque es un partido único e histórico", remató el Dt.
Para mañana el aforo permitido es de 14 mil persons y sólo 700 entradas fueron para Everton. Las puertas del estadio se abrirán a las 11.30 horas, tres horas antes del partido.