Priscilla Barrera Ll.

Horas de incertidumbre y terror vivieron la tarde del miércoles familiares, amigos y vecinos de una pequeña de sólo 11 años alumna del Colegio Kingstown School de Viña del Mar.

La menor desapareció cerca de las 17 horas sin que nadie supiera de su paradero. Sus padres tampoco podían ubicarla en su teléfono celular. Lo que no sabían es que la niña había recibido un llamado alertándola de que tenían secuestrada a su madre.

Como si la desaparición de la niña no hubiese sido suficiente, los padres de la pequeña recibieron un llamado telefónico desde un número desconocido en el que les advertían que tenían secuestrada a su hija por lo que debían pagar un rescate de 2 millones de pesos si querían volverla a ver.

"Este hecho ocurre ayer en la tarde, Carabineros se comunica conmigo el día de ayer (miércoles) dando cuenta de un supuesto delito de secuestro de una menor de 11 años por parte de sujetos desconocidos que llamaron a la madre, quien no se encontraba en el domicilio sino que en su local comercial, exigiendo la entrega de dinero".

Y agregó: "Y lo cual ella hizo de inmediato a unas cuentas que le entregaron, cuentas rut, luego de lo cual ella concurre al domicilio y no se encontraba la menor de 11 años y eso fue lo que derivó que se iniciarán de inmediato los procedimientos por la policía, primero de Carabineros y luego, por orden mía, una orden de investigar a la PDI de Viña del Mar con los efectos de investigar el hecho y los más importante dar con el paradero de la menor, lo cual ocurrió pasadas las 12 de la noche en Valparaíso", detalló el fiscal de Viña del Mar, Pablo Bravo, descartando la existencia del secuestro.

A través de la cuenta rut, se dio con una mujer que fue detenida en Santiago y quien declaró que la cuenta rut la manejaba su hermana quien sería una persona drogadicta. "Esos antecedentes tienen que ser verificados sin prejuicio de nosotros bloquear esas cuentas para obtener la retención y recuperar los dineros", precisó el fiscal Bravo.