Secciones

El drama de las mamás de la feria navideña

Muchas de las locatarias deben llevar a sus hijos a sus puestos de trabajo, ya que no cuentan con apoyo. De 92 puestos, 75 son atendidos por mujeres.
E-mail Compartir

Constanza R. Álvarez - La Estrella de Valparaíso

Navidad, época en que la familia se reúne junto al árbol a compartir e intercambiar regalos. Celebración que es fuente de alegría y calor de hogar, pero que también significa, para cientos de comerciantes, una fuente laboral.

Son muchos los que ven en estas fechas un negocio, por lo que juntan sus ahorros para traer juguetes y artículos de lugares, como por ejemplo la conocida Zofri en la zona norte. Incrementando así sus ganancias y presupuesto para el año.

En Valparaíso los puestos en la feria navideña del Parque Italia, son 92; donde se puede encontrar objetos como juguetes, ropa y artículos electrónicos de moda. De esta casi centena de stands, 75 son atendidos por mujeres de todas las edades.

Oportunidad navideña

El nieto de Ana María, Alonso de tres años, nació con una malformación en su ojo, lo que le impide ver.

"A mi nieto lo han operado, pero no nos han dicho lo que tiene en su ojo", comenta esta vendedora de la feria navideña del Parque Italia.

Su fuente laboral de esta época es la venta de pesebres y nacimientos; venta que no solo le sirve para tener dinero para comprar regalos y tener una cena navideña; también le sirve para juntar plata para la salud de su nieto y alguna posible operación.

Por otra parte, la hija de Mariana Peña, Sofía de 9 años, es consciente de que la actividad laboral de su madre es exigente. "A veces mi mamá termina tarde y yo me levanto igual para llegar a las 8 de la mañana al colegio", explica la pequeña quien además será premiada por su excelente promedio final este lunes en su colegio.

La realidad de Mariana es que este stand a un costado del Parque Italia, significa para su bolsillo dinero para pagar matrícula escolar, deudas y comprar mercadería durante todo el año.

Puestos Heredados

Tanto el puesto de la feria navideña de Ana María como el de Mariana son heredados, de hecho es una práctica muy común para la gente que pertenece al Sindicato de la Feria del Juguete; que lleva más de 50 años en este rubro. "Mi abuela y mi mamá trabajaron en esta feria, de hecho a mis hermanos los mudaban en el mostrador del stand", indica Ana María, mientras muda a su nieto, en el mismo lugar.

Pero aunque sean stands heredados, esto no los excluye de los permisos municipales. Solo este año debieron desembolsar la suma de 350 mil pesos, monto que no incluye los impuestos de la venta. "Esto significa una buena parte de mis ganancias", sentencia Mariana quien no vaticina una buena temporada.