Sección Deportes - La Estrella de Valparaíso

En agosto el volante David Pizarro renunció a Wanderers y en los últimos meses se le ha visto jugando paddle en Quilpué, además de apoyar la campaña del alcalde Jorge Sharp por mantener a Valparaíso limpio.

Pizarro también ha concurrido al estadio Elías Figueroa y en el último duelo en Playa Ancha, hasta comentó el partido para una radio local. Es por eso que todos especularon que su idea era limar asperezas con Wanderers y quizás hasta volver al club.

Pero ayer el portal italiano Tuttomercato, indicó que hay tres equipos que pretenden a Pizarro: Udinese, Bari y Pescara. "Pizarro tendrá pasaporte comunitario en enero y volverá a Italia", publicó este medio peninsular.

En el aspecto deportivo, el cuadro de Udine, que lo recibió en su juventud (1999), es el mejor aspectado en la Serie A, pues marcha en la décima posición. Pescara, en tanto, es el colista de la competencia y Bari, por último, es octavo de la Serie B del Calcio.

La opción de Udinese cobra fuerza debido a que sería del interés del técnico Luigi Delneri, quien ya lo dirigió en la Roma, mientras que en el Pescara desearían al ex caturro para intentar salir del último lugar. Por lo tanto la posibilidad del Bari sería la más complicada.

Con 37 años, Pizarro no ha querido colgar los botines y además de mantenerse en forma con el paddle, el playanchino juga constantemente pichangas con sus amigos y hasta algunos partidos por ligas amateur de la zona.

De nada sirvió la apelación de Wanderers y Mario Parra, que hasta con pruebas del arrepentimiento del autor de la acusación de tapar la insignia de Everton, se le mantuvo su castigo de las tres fechas por conducta antideportiva.

Ya de vacaciones, pero lejos de olvidar la situación de su sanción, Mario Parra tiene la esperanza de que nunca más se castigue a nadie de forma equivocada e injusta.

En Santiago, donde nació, espera Navidad en familia y confiesa el regalo que jamás le ha faltado en su arbolito: una pelota.

"El mejor regalo que he recibido ha sido un balón de fútbol y todos los años mis viejos -desde que nací- me regalan una pelota y hasta el día de hoy nunca han cambiado", confiesa el wanderino, quien es padre de dos pequeños.

Ignacia, la mayor de sus retoños, tiene 5 años, mientras que Santino apenas cumplió 6 meses.

"No sé si la tradición del balón de fútbol continuará con mi hijo. Ésta va a hacer la primera navidad de mi pequeño hijo, pero casi estoy seguro que empezarán por lo mismo: puras pelotas e implementos de futbol. Con mi hija es distinto, pues le gustan otras cosas no tanto el futbol", revela el defensa.

-¿Dónde pasan la Navidad con tu familia?

En la casa de mis padres en San Bernardo. Ellos me lo pidieron como un favor especial, pues mis hermanos ya están grandes y los únicos nietos que tienen son mis hijos.

Los jugadores de Wanderers tendrán 10 días de vacaciones para retornar el 3 de enero a la pretemporada caturra.

De acuerdo a lo informado por los dirigentes, específicamente por el vicepresidente Miguel Bejide, lo más probable es que no habrá refuerzos para el Clausura, pues en Wanderers no hay nuevos recursos para contrataciones y el técnico Eduardo Espinel optó por no desvincular a nadie del plantel.