Fabián San Martín D.

Graves, pero fuera de riesgo vital, se encuentran hospitalizadas dos personas baleadas en poblaciones de Valparaíso y Viña del Mar.

El primero de los casos se registró cerca de las 05.00 de la madrugada en Porvenir Bajo, Playa Ancha. A esa hora un sujeto identificado como P.J.K.L., de 31 años, escapaba por la calle 17 de un grupo que momentos antes lo había apuñalado en un brazo. Querían acabar con su vida, y al llegar al pasaje 3 le dispararon en varias ocasiones , se presume con un revólver.

No dieron en su objetivo, sino que en el rostro de un vecino que se encontraba en la calle afuera de su domicilio, identificado como C.E.A.G., de 54 años. Mientras los agresores escapaban, ambos heridos fueron llevados al Carlos Van Buren. El apuñalado -con antecedentes por ley de drogas- sufrió una herida cortante en el antebrazo izquierdo de carácter leve, mientras que C.E.A. tuvo una lesión a bala en la mejilla izquierda. Está grave pero fuera de riesgo vital. Posee un nutrido prontuario policial. Ambos no quisieron entregar mayores antecedentes sobre los agresores.

Viña del mar

Otro ataque con arma de fuego se produjo en Forestal. A la 01.45 horas de la madrugada, la Central de Comunicaciones fue alertada de un hombre herido por arma de fuego, y tendido en la vía pública en la calle O'Higgins del sector Loma Norte. Personal de la subcomisaría halló al lesionado y gestionó su traslado al hospital Gustavo Fricke. Se trataba de M.A.J.L., de 26 años, a quien le diagnosticaron heridas graves por arma de fuego, se presume de escopeta, en el antebrazo izquierdo y el rostro. El lesionado registra antecedentes por robo con intimidación y hurto simple, y no reveló mayores datos del incidente, el que podría tratarse de un ajuste de cuentas. La SIP de Carabineros indaga el suceso.

Un millonario robo cometió ayer una banda de antisociales en Viña del Mar.

Cerca de la medianoche un automóvil de color gris llegó hasta el frontis de una sucursal de la empresa de telecomunicaciones Entel, ubicada en avenida Nueva Libertad 1405. Desde el vehículo descendieron tres sujetos provistos de objetos contundentes -al parecer combos- con los que destrozaron un ventanal de la tienda.

Rápidamente ingresaron y se apropiaron de una gran cantidad de equipos móviles Iphone y de otras marcas, las que subieron al móvil y escaparon raudamente. Testigos alcanzaron a anotar la placa patente del vehículo, que corresponde a un Audi modelo A4 gris, que registra una orden vigente de robo en Valparaíso.

Ocurrido el delito al sitio del suceso acudió personal uniformado y de la SIP de la Primera Comisaría. L.M.M.E, jefa del local, avaluó la mercadería sustraída en 10 millones de pesos, y otros $5 millones los daños provocados al negocio por los delincuentes.

Dos extranjeras heridas, una de gravedad, fue el resultado de un accidente de tránsito en Isla de Pascua.

El siniestro se produjo cerca de las 11.20 horas en el sector rural Aka Hanga. Por allí se desplazaba en una moto de arriendo la turista canadiense J.M.G., de 45 años, acompañada de la estadounidense T.M.H., de 46 años. La conductora perdió el control del móvil y se precipitó sobre la calzada. Las visitantes se trasladaron por sus medios hasta el hospital Hanga Roa, donde se constató la conductora tuvo una herida leve en la rodilla izquierda, pero su acompañante resultó con una fractura en el peroné izquierdo de carácter grave. Se estableció que ninguna iba con alcohol. La canadiense fue detenida, pero luego quedó libre a la espera de ser citada a declarar.

Este siniestro se suma a otro protagonizado el fin de semana por turistas extranjeros en la isla. En este caso dos ciudadanos estadounidenses que de madrugada, en estado de ebriedad, volcaron en la cuatrimoto que habían alquilado.

La Brigada Investigadora de Delitos Económicos (Bridec) de Valparaíso, detuvo a una persona por la apropiación indebida de artículos de turismo aventura y andinismo. Fue identificado como C.M.V.O., 40 años, quien luego de la disolución de la sociedad que mantenía con el afectado, lo despojó de diversa mercadería avaluada en $5 millones, situación que impidió a la víctima trabajar en el rubro de manera normal. La PDI determinó que el autor del ilícito estaba en conocimiento del origen, dominio y propiedad de los productos y, pese a las reiteradas solicitudes de devolverlas, nunca las entregó a su ex socio.