Fabian San Martín D.

Desde pequeño soñaba con pertenecer a la Armada y actualmente llevaba dos años en la institución. Hoy está sindicado de ser el principal responsable del bullado caso de espionaje sexual a las tripulantes de la fragata Almirante Lynch.

La causa del penquista marinero 1° R.O.V., será analizada el próximo jueves 5 de enero en la Corte Marcial de Valparaíso. Los cargos en su contra son: grabar imágenes de carácter privado, grabar y difundir imágenes de carácter privado e incumplimiento de deberes militares. Está imputado de ser el principal responsable de la instalación del sofisticado dispositivo de grabación oculto en el buque de guerra, que consideró cableado por ductos de ventilación y otros recovecos estratégicos, que terminaron en los dormitorios de sus compañeras, entre marineros 1° y sargentos 2°. Fueron captadas en su intimidad, cuando de forma desaprensiva permanecían en ropa interior o desnudas. Las imágenes posteriormente fueron compartidas a través de un grupo de whastapp cerrado conformado por otros tripulantes de la nave, y por redes sociales, hasta que un tripulante alertó del hecho al comandante de la fragata, que denunció lo acontecido a la Fiscalía Naval. En principio el organismo procesó a nueve efectivos, entre marineros 1° y sargentos 2°, por infringir el artículo 161 letra A del Código Penal, que sanciona delitos que vulneran la intimidad de las personas e incumplimiento de deberes militarse.

El martes pasado uno de ellos fue absuelto por la Corte Marcial. De los ocho restantes el más complicado judicialmente es R.O.V., que se constató en la investigación fue el que adquirió el material de espionaje en China, a través de la tienda virtual Aliexpress.com.

El joven es oriundo de Talcahuano, ciudad donde su progenitor fue entrevistado por Chilevisión. Junto con lamentar el suceso en que se vio envuelto su hijo, el hombre dijo ignorar las razones que tuvo para protagonizar esta reprochable conducta. "Las cosas pasan por algo y en esto hay nueve involucrados...si tiene que asumir responsabilidades que lo haga con la misma convicción que es responsable y que asuma las consecuencias. En estas situaciones uno tiene que apoyarlo no más. Sigo siendo el padre y hay que estar en las buenas y las malas. Le dije que pase lo que pase siempre iba a estar al lado de él", expreso el atribulado padre del marinero.

Comandante en jefe

Otra autoridad que reaccionó ayer tras el escándalo fue el comandante en Jefe de la Armada, almirante Enrique Larrañaga. "Es un hecho lamentable que se aleja de los principios y valores de la institución. Una vez que se recibió la denuncia se adoptaron las medidas correspondientes como desembarcar al personal involucrado, remitir los antecedentes a la Fiscalía y comenzar un sumario administrativo. Es un hecho que repudiamos enérgicamente", sostuvo en entrevista con radio BioBio.

El mandamás de la Armada manifestó que los involucrados "son jóvenes que vulneraron principios que para nosotros son muy importantes: respeto a la privacidad, respeto a las personas, la camaradería y la lealtad con la gente que trabaja con uno (…) lamentablemente fueron las mujeres las afectadas, y por eso vamos a tomar todas las medidas disciplinarias y legales que la legislación permite", enfatizó.

El almirante no compartió los dichos del ex comandante en jefe, Jorge Arancibia, sobre la presencia de la mujer en la institución. Considera que los 10 años que llevan en las filas han sido todo un éxito. Respecto de este caso y lo ocurrido con guardiamarinas que fumaban marihuana en la Esmeralda, afirmó que son casos aislados que no enlodan la tradición de 200 años de la Marina. En ese sentido, sobre el caso de la fragata Lynch, recalcó que "estos hechos van a ser enfrentados con la mayor dureza, con la dureza que corresponde, para evitar que se repitan en el futuro".