Fabián San Martín D.
La PDI investiga el caso de una menor de edad playanchina que asegura fue drogada y violentada sexualmente.
Hace un par de días la familia de una adolescente de 14 años, domiciliada en la población Puertas Negras, estampó en Carabineros una denuncia por presunta desgracia, debido a que la niña salió del domicilio y no regresó al hogar.
La progenitora, pasadas las 22.00 horas, se apersonó en el cuartel de la tenencia Cordillera, para relatar que momentos antes su hija apareció en el domicilio, pero con signos evidentes de estar drogada, aparentemente por consumo de "pitos" de cannabis sativa.
Con el paso de los minutos, la adolescente relató a su familia que la noche anterior, de manera voluntaria se quedó en el domicilio de un amigo identificado como A.C., del que no especificó si se trataba de un adulto u otro menor de edad.
Drogada
De acuerdo al relato de la adolescente, mientras ambos compartían, el sujeto le ofreció un vaso de agua que ella de manera confiada ingirió. El líquido aparentemente estaba mezclado con algún tipo de medicamento adormecedor, ya que la afectada asegura que perdió el conocimiento. Despertó al día siguiente y notó que su zona genital estaba ensangrentada, y se levantó y retornó a su domicilio en la parte alta de Playa Ancha.
Tras escuchar el relato de la madre de la afectada, personal uniformado dio cuenta del suceso al fiscal de turno, que dispuso se dejara sin efecto la denuncia de presunta desgracia, y que el caso fuera remitido en su totalidad hacia la Brigada de Delitos Sexuales y Menores (Brisexme) de Valparaíso.
Tratamiento
El jefe (s) de la unidad policial, subprefecto Alex García, confirmó a este medio que la afectada se encuentra internada en el hospital Carlos Van Buren para un tratamiento de desintoxicación, ya que efectivamente presentaba claros signos de estar bajo el dominio de un sustancia indeterminada, se ignora por el momento si un medicamento o una sustancia alucinógena.
En el recinto asistencial también será sometida a exámenes ginecológicos que buscan acreditar que fue víctima de un ataque sexual.
Debido al estado de somnolencia en que se hallaba la paciente, los detectives no tuvieron acceso a contar con su testimonio para que entregara detalles de la forma y el lugar en que acontecieron los hechos, así como la identidad del agresor. "Por el momento ignoramos el contexto en que se sucedieron los hechos, si ella acudió a una fiesta o salió con alguien en particular", comentó el subprefecto.
Ayer la progenitora de la víctima asistió hasta el cuartel San Francisco para entregar su declaración respecto del caso, y se espera que durante los próximos días la PDI entreviste a testigos y realice otras pesquisas, tendientes a esclarecer la denuncia y ubicar al responsable del ultraje.