Carla Olivares Rojas
A un impactante registro tuvo acceso de forma exclusiva La Estrella de Valparaíso que ayuda a entender qué fue lo que ocurrió con Marcelo Román Román, el hombre de 51 años que fue atropellado en avenida Los Carrera de Quilpué a la altura del número 057, en la parada 28 durante los primeros minutos de este miércoles.
Fue una cámara de seguridad ubicada en el local "Stop Frenos", la que muestra los últimos momentos del jornal y que evidencia que el hombre se acostó en la calzada de forma deliberada en momentos que se dirigía hacia su domicilio.
A las 00.55 horas se advierte al trabajador caminar con un cigarro en la mano, le da una última y larga aspirada y lo lanza al piso, avanza un par de pasos y se acuesta en medio de la primera pista de circulación en posición fetal, con el antebrazo tapando sus ojos y sin sacar una mochila de su espalda.
Se mantiene inmóvil, pasan cinco automóviles por su lado y 55 segundos más tarde pasa el vehículo que finalmente lo arrolla a toda velocidad. El cuerpo se arrastra unos metros y del conductor no se sabe más.
A los pocos segundos se detienen otros automovilistas a ayudar, pero "el Gato", como era conocido, murió en el lugar.
Buscan testigos
La familia de "el Gato", está desconsolada y no entienden muy bien lo que sucedió. Relatan que ese día se fue a alojar a la casa de su mamá por el censo, pero se devolvió a la casa de su pareja y al retorno fue cuando ocurrió todo esto.
"Él era la pareja de mi mamá hace dos años y ella está muy mal. No asume lo que pasó. Pasaron los autos por su lado y nadie se detuvo a ver lo sucedido, si se había caído, estaba desmayado, si estaba curado, nadie, hasta que pasó un auto que le pasó la rueda por la cabeza. Ahí todos se bajaron, pero el auto siguió a toda velocidad por eso que ahora lo buscamos porque ni siquiera ofreció ayuda, no es una forma digna de morir, es horrible", relató Rossana Cariaga.
En la casa de su mamá, Marcelo Román estuvo compartiendo, tomaron algunos tragos y le dijo a su familia que se iba a morir, presumen que podría haberse tratado de un suicidio, pero de igual forma no comprenden la forma de actuar del automovilista que huyó del lugar en lugar de prestar ayuda.
En el sitio del suceso quedaron partes del auto, un pedazo de parachoques de color rojo y la funda plástica que va al interior del tapabarro.